Exposición en Santogal: el Purosangue llega a Madrid
El concesionario oficial de Ferrari en la capital recibió con todos los honores al nuevo miembro de la familia, tan largamente esperado. Había muchas ganas de verlo en vivo, porque ciertamente es aún más impresionante que en las fotos. La unidad expuesta es uno de los prototipos y ha ido pasando por diferentes puntos de la geografía europea.
Santogal organizó una presentación para sus clientes y otra para los medios de comunicación. Y después los ferraristi incondicionales, los que pueden optar a comprar este modelo, fueron recibidos de forma individual y personalizada, como es norma de la casa. Ver el Purosangue cubierto con una tela roja y luego descubierto, es un verdadero placer para los sentidos.
Ya se sabe que los modelos de Maranello son los más deseados del mercado, así que cuando lanzan series especiales o con poca disponibilidad como en este caso, el departamento comercial de la marca ha establecido un sistema para priorizar a sus clientes más leales.
Nos encontramos en el concesionario con uno de ellos, ferrarista desde hace décadas y comprador habitual de las versiones más deportivas. Es uno de los afortunados que tienen prioridad para hacer su pedido del Purosangue, está enamorado del coche y ya ha encargado el suyo, aunque sigue dudando con el color: gris o verde. Y nos confiesa además: “si me dejaran, me lo llevaba ahora mismo”, refiriéndose al coche expuesto.
En Santogal disponen de una amplia exposición donde los compradores pueden ver y tocar las llantas, los asientos o las tapicerías disponibles, y además tienen un configurador con una gran pantalla. Así el cliente puede ir viendo en tiempo real como queda cada una de sus peticiones, ya sean llantas o colores de carrocería o las innumerables posibilidades para el interior, con los diferentes tipos de cueros, bordados, acabados en carbono, etcétera.
Los afortunados entusiastas pueden ver su futuro deportivo desde todos los ángulos, en incluso rodando por carretera. Además, pueden llevarse a casa impresiones en papel o renders sobre como será su coche, para darles unas vueltas y repensar sus opciones con más detenimiento. Y con mucha frecuencia vuelven días después para cambiar algunos detalles. Ya dijo el sabio que l’attesa del piacere è essa stessa piacere (la espera del placer en sí misma es un placer).
Por suerte o por desgracia los compradores tendrán que esperar aún algún tiempo hasta que les entreguen su Purosangue, porque la demanda mundial ha superado todas las previsiones. Y hay otro factor que hará al Purosangue aún más exclusivo y difícil de alcanzar, y es que en Ferrari no quieren que este modelo suponga más del 20% de la producción total. Eso no ocurre en otras marcas de gran lujo que comercializan SUV. En Lamborghini las ventas del Urus suponen un 50 por ciento de las ventas (5.367 unidades del SUV comercializadas en 2022), y en Bentley las del Bentayga supusieron en 2022 un 42% del total (4.200 unidades del 4x4). De modo que si en 2022 Ferrari comercializó 13.221 unidades, la producción anual de Purosangue no debería superar los 2.000 coches. La excelencia del nuevo modelo tiene un precio en consonancia. Cuesta 440.000 euros más impuestos y opciones, de modo que los coches configurados están alcanzando un precio final de entre 550.000 y 600.000 euros.
Para arropar el nuevo cuatro plazas, Santogal organizó además una interesante exposición sobre la historia de los modelos 2+2 (o con cuatro plazas reales como el FF y el GTC4Lusso) fabricados por la empresa. Todos ellos pertenecientes a clientes de Santogal, que por supuesto da servicio también a los coches históricos. Igualmente ofrecen el servicio de certificación Ferrari Classiche, que comprueba la originalidad de cada modelo, y es el único punto de venta en España que lo tiene.
Las recientes instalaciones inauguradas en 2022 cuentan con 1.000 metros de exposición, 1.000 metros de taller, 12 plazas de apoyo al taller y 50 plazas para storage de vehículos. El modelo más veterano que pudimos admirar en la exposición fue un elegante 250 GT blanco con matrícula original de Madrid, y el más moderno, un GTC4Lusso. ¡La leyenda continúa!