Así fue Barret Jackson, la mayor puja del mundo
El evento celebrado en enero en Scottsdale (Arizona) es un acontecimiento multitudinario en el que se han vendido 2.016 coches por un valor de 200 millones de dólares.
El 540K es para muchos la cumbre de los automóviles de preguerra, y esta unidad es única gracias a su carrocería. En los coches de lujo construidos antes de la II GM era habitual que recibieran carrocerías elaboradas por carroceros de renombre, independientes del fabricante de la mecánica. Sin embargo, el 540K desafió las convenciones. Las carrocerías Mercedes de fábrica eran tan apreciadas que, según Barrett-Jackson, solo 70 de los 419 vehículos producidos entre 1936 y 1940 montaron carrocerías personalizadas. Los 540K llevaban un ocho cilindros en línea de 5.4 litros sobrealimentado que rendía 180 CV. El propietario del chasis nº 154080 encargó a Mayfair Carriage Company de Londres la elaboración de su carrocería.
Esta variante, encargada específicamente con un radiador retrasado diseñado para automóviles abiertos de fábrica, conocida como “Fahrgestell mit zuruckgesetztem Motor” (chasis con motor retraído), presentaba una modificación distintiva. El radiador y toda la transmisión estaban retrasados 185 milímetros, algo visible por la posición relativa del radiador respecto el eje delantero. Esta alteración le dio un estilo único, con una apariencia general más larga y baja. De color negro, fue entregado a su primer propietario en octubre de 1937, en París. Tras la Guerra el coche estaba en Londres, y fue comprado por un canadiense que lo llevó a su tierra. Tras muchas vicisitudes (como en cambio de color a rojo en 1984), en 2007 fue comprado por Don Williams, cofundador de Barrett-Jackson.
Lamborghini Diablo VT Roadster (1997) ex Donald Trump
El ex presidente despierta pasiones entre muchos seguidores, y hemos visto hasta un Aventador vinilado con su cara. Este fervor disparó el interés por la unidad que nos ocupa, estrenada por el empresario y que vendió en 2002. Con solo 24.800 km en el contador, su peculiaridad es el color “Le Mans Blue”, siendo el único Diablo pintado en ese tono en 1997.
Porsche 918 Spyder (2015)
Con Weissach package, color Acid Green y con solo 1.573 millas en el contador, es el número 891 de los 918 fabricados. Curiosamente un Carrera GT amarillo con 3.000 km se vendió más caro (1,87 m.), un sorpasso poco habitual.
Mercedes G63 AMG 6x6 Brabus (2014)
Modificado por Brabus, la denominación oficial es B63S-700, que indica su potencia. Tiene 10.748 km y fue importado a EE UU bajo la normativa “Show & Display”. También fue modificado para cumplir con las emisiones de California.
Mercedes 300 SL “Gullwing” (1956)
Durante los últimos tres años ha sido desmontado y restaurado por completo, de modo que está mejor que nuevo. Tapizado en cuero y con unos asientos con el centro en tartán verde y blanco, lleva también las deseables llantas Rudge.
Chevrolet Corvette Custom Convertible (1967)
Los clásicos americanos son los más abundantes en esta subasta, y los restomod ganan protagonismo. Esta belleza ha sido modificada por Jeff Hayes con un V8 LS3 y lleva chasis deportivo, techo eléctrico, aire o estéreo con Bluetooth.
Hummer H1 Alpha Custom Wagon (2006)
Esta bestia es uno de los 729 H1 Alpha producidos, y de los 448 Gen 1, es el único que lleva el 6.6 V8 turbodiésel Duramax potenciado a con 500 CV y 1.220 Nm de par. Marca 19.744 millas y también lleva un kit de orugas para nieve.
Ferrari LaFerrari (2015)
Anunciado desde hace meses, el deportivo del rockero Sammy Hagar (Van Halen) iba a ser la estrella, pero se retiró porque la batería (es híbrido) necesita ser sustituida aunque solo tiene 1.100 millas. Sin confirmación oficial, se rumorea que cuesta unos 12.000 dólares, poco para un coche de cuatro millones. Su peculiaridad es el color Avorio (marfil), empleado en los años 50 y relanzado en 2007 junto a otros nueve tonos históricos.