Prueba Subaru BRZ: así es el mejor coche deportivo calidad-precio que puedes comprar

El Subaru más radical de la gama nos sigue apasionando en esta segunda generación, desde aquí hacemos un llamamiento a todas las marcas para que este tipo de coches nunca desaparezca.

Sentir un coche con motor atmosférico, manual y de tracción trasera es lo más cerca que estamos los simples mortales de hoy en día de experimentar el verdadero placer de conducir. Porque sí, tener un coche turbo con una transmisión automática y tracción a las cuatro ruedas es más rápido, pero los matices de una conducción más pura siempre nos transmitirán más diversión.

Construido sobre un motor bóxer de 2.4 litros y 4 cilindros que desarrolla 234 CV (34 más que el antiguo modelo), el BRZ es un coche ágil que tan solo pesa 1.364 kilos. Lo que verdad enamora de este modelo es el sonido de ese motor atmosférico que se pone a ronronear como un león cuando lo subimos a más de 4.000 vueltas.

El placer de conducir es lo primero que llama del BRZ, pero las calidades interiores también nos han sorprendido. Sí es verdad que no vamos a encontrar los mejores materiales, debido a que todas sus balas las gasta en ser un coche ligero y con un gran motor. Sin embargo, y sabiendo esto de antemano, he quedado gratamente satisfecho con el interior. Las plazas traseras son muy difíciles de usar por el poco espacio del que disponemos.

Las comparaciones son inevitables

Pocos coches pueden asemejarse a las sensaciones que te ofrece el Subaru BRZ por menos de 40.000 (39.500€) euros, aunque su hermano de Toyota es prácticamente idéntico. Como paso en 2012 con el GT 86 ambas marcas comparten mecánicas, diseño y prácticamente son dos gotas de agua. Eso sí, el GR86 de Toyota es 5.000 euros más barato (34.500 €) y os preguntaris ¿a que se debe esto? Pues simplemente, el Subaru tiene un equipamiento mayor, por ejemplo, monta llantas de 18 pulgadas en vez de las 17 del Toyota.

¿Alguien que ofrezca menos?

Eliminando a su hermano de Toyota hay pocas marcas que ofrezcan estas sensaciones por este precio. En la actualidad, los coches así están desapareciendo, la moda de los SUV copa el mercado y las marcas han dejado de invertir esfuerzos en coches deportivos de estas características. Si queremos experimentar algo similar, difícilmente podremos hacerlo con una aspiración natural, eliminando los turbos. Aunque si nos olvidamos de este detalle, Audi tiene su TT, Mercedes el Clase A AMG 35, BMW el 128 ti, y no comparten la misma filosofía que el BRZ, además hay que rascarse más el bolsillo para poder adquirirlos.