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Prueba BMW Serie 3 330e: el rey de las berlinas PHEV

Probablemente, BMW esté igual de sorprendida que nosotros con este Serie 3 330e, y es que gracias a su sistema híbrido, la marca afirma que el 25% de todos los Serie 3 vendidos son esta versión, asi que vamos a probarlo para ver que lo hace tan popular.

Serie 3 330e

Por un lado, es muy bueno para conducir. No es perfecto, nada lo es, pero es muy bueno. Por otro lado, la gama de conducción eléctrica es utilizable hasta el punto de que cubrirá la mayoría de los desplazamientos de los propietarios.

Y, por último, está la función XtraBoost, que eleva la potencia combinada de gasolina y electricidad a 292 CV, aunque sólo sea durante breves periodos de tiempo.

Toda la potencia, parte del tiempo…

Combinando el mismo motor de gasolina turbo de 2,0 litros que se encuentra en el 320i normal con un motor eléctrico que está perfectamente integrado en la caja de cambios automática Steptronic de ocho velocidades.

Serie 3 330e

El empaquetamiento es tan bueno que la carcasa es sólo 15 mm más larga, en comparación con la caja automática de ocho velocidades estándar instalada en otras partes de la gama de la Serie 3.

El hecho de tener el motor en esta posición también favorece la eficiencia, sobre todo en lo que respecta a la regeneración de la energía de frenado.

El motor de gasolina proporciona 184 CV, mientras que el motor eléctrico ofrece hasta 113 CV, aunque, como suele ocurrir con los sistemas híbridos, no se pueden sumar ambas cifras para obtener la potencia total del coche.

La cifra máxima oficial del 330e es de 250 CV sin recurrir a la función XtraBoost.

¿Cómo funciona el XtraBoost del Serie 3 330e ?

Esperábamos un botón de tipo nitroso, similar al Sport Response de Porsche. Pero en realidad es sólo un elemento adicional de la configuración del modo de conducción Sport de BMW, y se activa seleccionándolo y pisando el acelerador. Por lo tanto, también se activa mediante el kickdown en la configuración de la transmisión S o M.

Sin embargo, dado que el salto a los 292 CV se produce enteramente mediante el uso de 40 CV adicionales del motor eléctrico, la respuesta es bastante impresionante. Tanto es así, que BMW considera que a partir de 20 km/h te dará el doble de «vigor» que un coche convencional de potencia similar en un segundo, y después de tres segundos estarás un coche más adelante.

Exactamente el tipo de rendimiento que los compradores de BMW preocupados por el medio ambiente probablemente están buscando.

¿Funciona en la carretera?

En términos de aceleración, absolutamente. Si se le da al pedal derecho el pisotón que se merece, el 330e es como un conejo con un lurcher en la espalda: sale a chorros con verdadera determinación para llegar a la siguiente curva antes que todo lo que viene detrás.

Serie 3 330e

Al ser un BMW, también tiene la capacidad de llevar esa aceleración inicial a las curvas sin estrellarse contra el paisaje. O que le arranquen la cabeza.

Sobre el papel, el 0 a 100 km/h tarda 5,9 segundos, pero eso no hace justicia al esfuerzo en movimiento. En la autopista, adquiere más velocidad que el 330d.

Sin embargo, aunque el efecto XtraBoost sólo dura 10 segundos cada vez, está disponible incluso si ya has agotado toda la autonomía eléctrica de las baterías principales del híbrido. Además, ¿con qué frecuencia aceleras durante más de 10 segundos seguidos?

¿Es el 330e un buen híbrido?

Sí, y es difícil no estar muy impresionado: el 330e es capaz de conducir hasta 65 km sólo con energía eléctrica, y hay un mayor número de opciones para aprovechar al máximo esta eficiencia eléctrica.

Por ejemplo, puedes establecer un porcentaje orientativo de la vida de la batería que te gustaría conservar, si quieres guardar la energía eléctrica para cuando estés en una zona de bajas emisiones o para intentar avanzar sin despertar a los vecinos, y el coche hará todo lo posible para gestionarlo en tu nombre.

Nuestros resultados iniciales con esto fueron mixtos (básicamente, arrancarlo todo el tiempo inevitablemente seguirá agotando las baterías), pero también hay una configuración automática, que funciona con la guía del navegador por satélite para elegir los puntos más apropiados en su ruta para desplegar la electricidad.

Serie 3 330e

Además, puedes activar manualmente el modo totalmente eléctrico, que llevará al coche hasta las 120 km/h y lo mantendrá hasta que se agote la autonomía restante. Sin embargo, no esperes recorrer 65 kilómetros con electricidad a esa velocidad.

Entonces, ¿Algo que reprochar?

Ah. La pega es que a pesar de las prestaciones, el 330e no es el coche más emocionante de conducir. Claro, es rápido. Pero el motor de cuatro cilindros no puede compararse a la potencia y la acústica de un M3.

No nos malinterpretes, este sigue siendo un coche que se traga una serie de curvas sin pestañear, y vuelve con ganas de más. Sólo que se ha perdido un poco de alegría en el proceso, como lo demuestra el tacto ligeramente ligero y artificial de la dirección. Pese a todo sigue siendo muy agradable en todo momento.

El espacio del maletero se ha resentido ligeramente para dar cabida al depósito de combustible y las baterías. Aun así seguiremos teniendo bastante espacio. Para poner una cifra al impacto de esto, una berlina estándar de la serie 3 tiene 480 litros de espacio en el maletero, mientras que el 330e tiene sólo 375 litros.

Los sistemas de infoentretenimiento y los diales digitales ganan opciones de visualización relacionadas con los híbridos, pero aparte de la reordenación de algunos botones en la consola central, ésta es la única diferencia en el habitáculo.

Al igual que en el coche estándar, la calidad está a la altura. El 330e está disponible en las versiones SE, Sport y M Sport, al igual que el resto de la gama británica.

Consumos y tiempos de carga del BMW Serie 3 330e

El consumo medio del Serie 3 330e puede llegar a set tan bajo como 1,3 litros en modo combinado gracias a la ayuda del motor eléctrico.

Para realizar una carga completa de sus baterías tarda 3h 25m usando un BMW i Wallbox, o 5h 40m usando un simple enchufe de tres clavijas.

BMW Serie 3 330e PHEV: veredicto

La palabra que más fácilmente nos viene a la mente es «impresionante»: el híbrido enchufable de BMW no se queda en un mero ejercicio de marcar las casillas, con un rendimiento abundante, una autonomía eléctrica ampliada y algunos trucos inteligentes. Y por eso es tan popular.

Si vas a comprar uno para ahorrarte los impuestos y a la vez disfrutar de una buena berlina, puedes estar seguro de que es un BMW de principio a fin y que se conduce como es debido.

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