Mercedes rediseña la movilidad del futuro con el Generation EQ
El precursor de la primera generación de vehículos completamente eléctricos (EQ) de Mercedes tiene una estética de un SUV coupé deportivo.
La nueva generación EQ de vehículos eléctrico se basará en una arquitectura común, creada en exclusiva para la propulsión eléctrica por batería. Esta arquitectura modulable permite aplicaciones a escala en todos sus aspectos y podrá utilizarse con independencia del modelo. La composición de la estructura se basa en una combinación de varios materiales, formada por acero, aluminio y fibra de carbono.
Diseño futurista
En el diseño de la nueva generación EQ predomina la suave transición entre el capo negro brillante, el parabrisas y el techo panorámico tintado oscuro, generando un gran contraste con la pintura de color Alumbeam plata.
Las juntas de la carrocería apenas son perceptibles, junto con los limpiaparabrisas ocultos, cámaras en vez de retrovisores exteriores y una carencia de manillas convencionales en las puertas contribuyen a dibujar la silueta dinámica y estilizada de la «Generation EQ». En los laterales relucen los anchos hombros y las grandes llantas de aleación de 21 pulgadas.
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Tecnología de otro mundo en el interior
En el nuevo diseño interior de la «Generation EQ» eleva los estándares de elegancia modernos. En el interior vemos la ausencia de los interruptores y teclas convencionales. La única excepción en este aspecto es el mando característico de Mercedes para el ajuste eléctrico de los asientos. En el volante encontramos unas pequeñas pantallas OLED (diodos luminosos orgánicos) para el Touch Controls. Estos componentes muestran los diferentes iconos y símbolos de los menús correspondientes; con la función táctil el conductor puede navegar por los distintos menús con un simple gesto.
Cuenta con una pantalla TFT de 24 pulgadas de alta definición que se muestra en el campo visual del conductor todos los datos relevantes como la velocidad, GPS y autonomía. La configuración de la información es totalmente personalizable, pudiendo mantener una exposición simple de la información y otra más compleja.
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El Generation EQ está equipado con cuatro asientos individuales con un diseño vanguardista. Los altavoces integrados en los reposacabezas son la clave para una experiencia acústica novedosa. El cuero de los laterales de los asientos es de color blanco luminoso y la perforación con efecto de «lluvia de píxeles» permite ver el fondo de partículas en oro rosa. Los monitores TFT del equipo de entretenimiento para las plazas traseras se integran en los respaldos de los asientos delanteros.
Diseño luminoso tanto para el interior como para el exterior
Un elemento característico de la «Generation EQ» es la parrilla frontal «Black Panel». En este componente con acristalado de una sola pieza se integra la estrella de la marca alemana iluminada en color blanco. Los componentes iluminados de LED y fibra óptica en color «electric blue» recrean escenarios luminosos.
Los diseñadores de Mercedes han rediseñado los pilotos traseros. En este caso, asumen el contorno del «Black Panel» y están enmarcados por un elemento de LED y fibra óptica en «electric blue» que cambia a rojo durante la marca y ejerce así de función trasero.
Propulsado por energía eléctrica
Obtiene unas altas prestaciones gracias a sus dos motores eléctricos – uno alojado en el eje trasero y otro en el delantero-, junto con su batería alojada en el piso del vehículo. Los dos propulsores generan una potencia de 400 CV en la versión más potente del equipo de propulsión y un par máximo de hasta 700 Nm, dotando al EQ de una aceleración de 0-100 km/h en menos de cinco segundos. Todo ello gestionado de forma inteligente, logrando una autonomía de hasta 500 kilómetros.
Sistema de recarga
El EQ se beneficia de los nuevos sistemas de carga. Existe la posibilidad de cargarlo en el propio garaje, por inducción o conectándolo a un wallbox, y otra opción de carga rápida.
Con el fin de reducir el tiempo de carga se introducirá en un futuro cercano la carga rápida mediante el Combined Charging System (CCS). A medio y a largo plazo está previsto operar con una potencia de carga de hasta 300 kW (el doble de la actual). Con este sistema es posible acumular en solo cinco minutos la electricidad necesaria para cubrir hasta 100 kilómetros de autonomía.