Los NFT en el sector del automóvil, cotizados por los más entusiastas
Que si “blockchain”, bitcoin, ether, fintech’s, NFT… Desde las páginas de los periódicos y especialmente aquellos económicos, nos bombardean con palabrejas que parecen indescifrables pretendiendo describir el nuevo mundo de las criptomonedas y de los “contratos inteligentes”. Los equipos de competición, los grandes constructores de automóviles y los coleccionistas de coches clásicos y vintage, también comienzan a utilizar de manera acelerada esta tecnología cripto, sobre todo a través de los “contratos inteligentes”, que son los NFT, en inglés “Non Fungible Tokens”.
Se trata, en codificación digital muy segura, el equivalente a los cromos coleccionables de nuestra niñez, que más valían cuanto más raros… La punta del iceberg son de momento imágenes digitales, consideradas “arte”, que se venden y revenden, como si fueran acciones con cotización diaria, en las tiendas denominadas “marketplace”.
El empleo más trascendental y a largo plazo es la revolución que la tecnología de los NFT otorga a la industria en general y, entre ellas, a la del motor. Empresas operadoras del mundo crypto y de los NFT están entrando en tromba en la F1, a una velocidad mucho mayor que a finales de los años sesenta y comienzo de los setenta lo hicieron las multinacionales tabacaleras.
El exchange (casas de cambio) de monedas virtuales, crypto.com regará con 84 millones de dólares a Liberty, la propietaria americana de los derechos de la F1, como patrocinadora de varias carreras durante la temporada y ayudará a la marca “F1” a desarrollar sus propios NFT. Crypto.com es un peso pesado del mundo de las criptomonedas, tiene 10 millones de clientes y se prepara para llegar a 100 millones en 2025. Pero los de Liberty no son los únicos que quieren jugar en primera de la nueva liga.
McLaren y Red Bull se han asociado con Tezos, una empresa creadora de la moneda virtual del mismo nombre (XTZ) y de una cadena de bloques de código abierto, fácilmente escalable y que puede ser utilizada por creadores de aplicaciones y otros operadores. Poco tardarán Red Bull, Max Verstappen y Lando Norris en ver imágenes o videos suyos convertidos en NFT destinados a los fans que se comercializarán en las “tiendas” (marketplaces) asociadas a Tezos.
McLaren y Red Bull se han asociado con Tezos, una empresa creadora de la moneda virtual del mismo nombre (XTZ) y de una cadena de bloques de código abierto, fácilmente escalable y que puede ser utilizada por creadores de aplicaciones y otros operadores. Poco tardarán Red Bull, Max Verstappen y Lando Norris en ver imágenes o videos suyos convertidos en NFT destinados a los fans que se comercializarán en las “tiendas” (marketplaces) asociadas a Tezos.
También Aston Martin ha entrado en el juego: el equipo de F1 propiedad de Lawrence Stroll ha lanzado una colección de NFT con el nombre de su equipo de F1 a través socios.com, detentora además de los derechos digitales de la NBA. Se trata de videos muy cortos, solo de algunos segundos, de los cuales hay en torno a 500 copias certificadas que al lanzamiento se vendieron a 220 euros cada una y de las que se pedían para la reventa 840 euros a mediados de septiembre.
El grupo Renault ya ha puesto en marcha, con asistencia de IBM, un proceso de trazabilidad segura e instantánea a través de los NFT. Desde parabrisas hasta posavasos provenientes de proveedores externos y múltiples procesos internos quedan registrados y firmados con responsabilidad individual.
Para marcas de todo tipo, los NFT en forma de cromos o tarjetas coleccionables, videos, etcétera, son una nueva forma de marketing. El token de un deportista famoso, además de incluir una imagen o video exclusivo del mismo, puede ofrecer un encuentro personal, entradas para una competición y otras recompensas. ¿Cuánto puede valer un token de Max Verstappen o Lewis Hamilton (con una o varias copias) si además de incluir una imagen exclusiva comprende pasar un día con ellos?
BMW, a través de su filial brasileña, ha creado una colección de NFT digitales comenzando con una obra sobre el Serie 3 de cuatro puertas que se ensambla en Araquiri, Brasil. El fotógrafo y artista Gabriel Wickbold ha gestado cinco obras de arte convertidas en NFT digitales, inspiradas sobre elementos de “pasión, movimiento, innovación y tecnología”. En diciembre se presentan y subastan estas pinturas digitales y lo recaudado se donará a instituciones de beneficencia.
También con un fin benéfico subastó Porsche en agosto pasado un dibujo a mano alzada de su director de diseño exterior Peter Varga. El boceto, que combina rasgos del Taycan Cross Turismo y el mítico 911 se subastó por 90.000 dólares que se entregaron a la ONG Viva con Agua. En esta ocasión se entregó el archivo digital pero también el dibujo físico.
Los propietarios de coches de colección pueden recurrir a Carchain, empresa que crea un NFT donde se registran todos los datos que identifican y dan valor al vehículo. Cuando este se vende, el NFT se transfiere al nuevo propietario y así sucesivamente, garantizándose una trazabilidad o historial inmutable de la vida del vehículo, aparte de los documentos de propiedad y certificaciones tradicionales. Esto evita fraudes y da más seguridad a los propietarios.
Los NFT ofrecen la posibilidad de adquirir una parte de un modelo de colección codiciado. Adquirido el token, que constituye una parte alícuota del bien, como podría ser un Ferrari 308 o un F40, el propietario puede conservarlo o revenderlo con la seguridad de una liquidez inmediata, algo que no es fácil de conseguir con este tipo de activos.
Texto por: Orlando Ríos