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Lamborghini Countach y Gandini: él lo hizo

El Lamborghini Countach es pura emoción, y según dice Gandini en un reciente video conmemorativo, “la forma debe seguir a la emoción”. En CAR creemos que la grandeza del Countach está ante todo en su estilo, porque su tecnología, siendo muy brillante, no era especialmente novedosa.

Lamborghini Countach

El genio del diseño recuerda que el Lamborghini Countach nació en un periodo en el que había mucho entusiasmo respecto a la carrera espacial. Y en efecto, el Countach siempre ha parecido una máquina llegada de otro planeta.

Curiosamente, Gandini no realizó estudios específicos sobre automóviles o diseño. A pesar de que nació en una familia artística (su padre era director de orquesta) esto no le ayudó a decidirse a hincar los codos. “No disfrutaba con los estudios de piano y todo eso. Quizá sea la reacción natural cuando tus amigos están todo el día jugando en la calle”.

Estudió hasta los 18 años pero no fue a la Universidad, y comenzó a ganar experiencia como diseñador modificando los coches de amigos que competían en carreras en cuesta.

Cuenta que una vez cortaron la parte trasera de un Abarth 750 Zagato y cubrieron lo descubierto con una rejilla para ver si era más ligero, y por lo tanto más rápido. Experimentos como este le sirvieron para que le ofrecieran trabajos, incluyendo el diseño de un cupé para la empresa carrocera Touring.

Comenzaban los años sesenta del siglo pasado, y a través de contactos fue invitado a enseñar sus bocetos a Nuccio Bertone. “Eran trabajos de principiante, ideas locas, pero diferentes”. Es indudable que causó buena impresión, y el 1 de noviembre de 1965, con 27 años, entró a trabajar en la famosa empresa carrocera.

Por su parte Nuccio Bertone (1914-1997) supo ver rápidamente el talento de Gandini. Como dijo una vez el diseñador Walter Da Silva, Gandini era el violinista solista, pero Bertone era el director. Carrozzeria Bertone fue fundada en 1912 por Giovanni Bertone, y su hijo Giuseppe, al que todos llamaban Nuccio, entró a trabajar con 19 años.

Lamborghini Countach

“Inicialmente me iba a dedicar a la contabilidad y la gestión, pero mi pasión por el diseño fue creciendo al ver las creaciones de mi padre sobre chasis Fiat o Alfa Romeo”. Bertone vivió su época dorada en los años sesenta, setenta y ochenta del siglo pasado, fabricando coches para varias marcas e incluso bajo la suya propia, como el todoterreno Freeclimber de 1989. En la década de los cincuenta se produjo un hecho trascendental.

Con el Alfa Giulietta Sprint pasaron de producir pequeñas series a convertirse en verdaderos fabricantes, y en 1959 se inauguró la factoría de Grugliasco.

Nuccio lo recordaba así: “Asumimos muchos riesgos, porque la inversión necesaria no solo requería de todo el capital que pudiéramos conseguir, también del respaldo del patrimonio familiar”. Después produjeron otros deportivos de gran volumen, como el Fiat 850 Spider o el Fiat X1/9.

La época dorada antes de la llegada del Lamborghini Countach

En los años sesenta y setenta crearon deportivos y prototipos mundialmente admirados como el Lamborghini Miura o el Lancia Stratos (creados por Marcello Gandini) y también trabajaron en Bertone maestros como Giorgetto Giugiaro o Franco Scaglione.

Nuccio conducía a diario joyas de la casa como el Iso Grifo o el Ferrari 308 GT4, y encontraba la inspiración en la naturaleza. Tras la muerte de Nuccio en 1997, la empresa entró en decadencia.

Lamborghini Countach

En 2005 se quedaron sin coches para fabricar, tras producir el Opel Astra Cabrio y una pequeña serie del Mini GT. Como consecuencia de ello llegó la bancarrota en 2008. En aquellos días la gestión estaba en manos de las hijas de Nuccio. Asimismo la factoría de Grugliasco fue vendida a Fiat en 2009.

En 2010 Lilly Bertone, la esposa de Nuccio, retomó el control de la empresa pero no consiguió llevarla a buen puerto. Quebró en 2015 y sus bienes fueron subastados años después. Ella falleció en 2019.

A Gandini, por su parte, siempre le ha gustado ir a su aire, y en su momento rechazó el cargo de director de Stile Bertone para trabajar por su cuenta. Es un caso muy diferente al de otro genio de su generación, Giorgetto Giugiaro, que montó la empresa Ital Design en 1968 y que la vendió al grupo Volks-
wagen en 2010.

Entre Giugiaro y Gandini nunca ha habido buena relación, provocada también por las insinuaciones de Giugiaro de que Gandini se habría inspirado en bocetos que dejó en Bertone para crear al Miura.

Gandini dice al respecto de la relación con Giorgetto Giugiaro: “Nos hemos encontrado en un avión algunas veces. Me siento, vuelvo la cabeza y ahí está él. Es inevitable decir algo pero, ¿cuál es la pregunta?, ¿cuántos empleados tienes ahora? La primera vez tenía 200. La siguiente 400. Yo nunca he tenido ninguno”.

Hace algunos años tuvimos el placer de visitar a Gandini en el pequeño pueblo donde vive, en una casa de campo a la que se llega por un discreto camino de grava.

La decoración era agradable pero sin excesos, algo poco previsible en el hombre que ha diseñado los deportivos más llamativos y electrizantes de la historia. Su sentido de la sencillez también se reflejaba en su estudio, que ocupa un patio parcialmente cubierto de la villa del siglo XVII reconstruida.

Lamborghini Countach

Tenía cuatro pastores alemanes y sobre la mesa de trabajo había varios lápices y gomas de borrar junto a partes de automóviles. En las paredes, enormes tablas de dibujante.

También vimos varias maquetas a escala. Lo más curioso es que no había ningún ordenador, algo inimaginable para un diseñador joven, muchos de los cuales dibujan directamente sobre las pantallas.

Un gran currículo

Ya que, además del Miura o el Lamborghini Countach, diseñó otros Lamborghini, como el Espada, el Jarama, el Urraco o el Diablo. Quisimos saber cuáles fueron sus fuentes de inspiración. Sus sencillas respuestas serían una pesadilla para un director de comunicación. Las famosas pestañas oscuras que rodean los faros de Miura fueron solo un método para enmascarar la realidad: “Las luces eran del Fiat 850 Spider y no quería que fueran reconocibles”.

Lamborghini Countach

También fue el hombre que creó el multicampeón Lancia Stratos de rallyes de 1971, con ese parabrisas estilo visera de casco. “Nosotros simplemente quisimos hacer un coche que atrajera a la gente, independientemente de que ganara carreras. Siempre está el riesgo de que un bonito coche de competición no gane, pero al menos es atractivo”.

También es suyo el increíble Lancia Stratos Zero que mide solo 84 cm de alto (un Lotus Elise alcanza 111 cm), y la única puerta para acceder es también el parabrisas. “El objetivo no fue hacer el coche más bajo posible, aunque ocurrió. Lo que realmente me impulsó fue hacer algo que sorprendiera de verdad a la gente. Esa actitud es la madre del éxito”.

Lamborghini Countach

Quizá has oído la historia del hombre de negocios americano que subió su Miura en helicóptero a la azotea de un rascacielos para poder verlo durante las reuniones de trabajo. O aquella de que Emerson Fittipaldi estaba tan enamorado del Stratos Zero, que convenció a Bertone para probarlo, aunque aún no estaba terminado.

¿Recuerdas el Stratos Zero del video Moonwalker de Michael Jackson? Pues era una copia porque Bertone no dio permiso para que se llevaran el original, nos cuenta Gandini.

Lamborghini Countach

El italiano no solo diseñó coches de póster, también otros muchos que quizá hayas tenido en casa. Es el caso del Citroën BX, el Renault 5 “Supercinco” o el BMW Serie 5 de primera generación.

¿Qué piensa del diseño de los coches actuales? “Hoy es más difícil impactar a la gente. No hay una diferenciación entre un coche de ensueño que pocos pueden comprar, y un feo y pequeño pero práctico utilitario.

Un Opel Corsa o un Ford Fiesta están diseñados como prototipos, con detalles innecesarios. Hay familiares con poca capacidad, o berlinas estilo cupé con plazas traseras incómodas”.

Curiosamente Gandini nunca se ha preocupado de coleccionar automóviles. Cuando le llamaron para ofrecerle el último Countach que salió de la factoría, lo rechazó diciendo que no quería terminar dándole cera cada dos por tres. Dice enigmáticamente: “olvidé comprar coches”, pero sí que considera al Countach su mejor creación.

El camino a nuevas ideas que trajo el Lamborghini Countach

Medio siglo después Marcello Gandini considera que “la Countach” sirvió además para difundir “una nueva educación” en cuanto a diseño, abriendo el camino a nuevas ideas. Añade además que “los automóviles están en la vida de todo el mundo y trasmiten sensaciones, aunque sea marginalmente.«

El automóvil siempre ha sido un sueño, y ha perpetuado ese carácter gracias al hecho de que es, al mismo tiempo, una alfombra voladora y una casa, algo que no es posible para ningún otro objeto”.

Lamborghini Countach

Nos gustaría saber si Gandini ha colaborado en el nuevo Countach, pero la marca no ha comunicado nada al respecto. Lo que está claro es que el actual jefe de diseño de Lamborghini, Mitja Borkert, ha asumido una gran responsabilidad al encargarse de hacer renacer al mito.

Millones de aficionados mirarán con lupa el resultado, e invariablemente también tendrá que asumir críticas. Si lo haces demasiado parecido (como el Ford GT de 2005) dirán que ha sido fácil, y si lo haces demasiado diferente, que ha perdido su esencia. Desde nuestro punto de vista el Countach LPI 880-4 es un gran logro que actualiza el diseño del icono de los setenta.

Además, los diseñadores no han partido de una hoja en blanco sino que aprovechan la base mecánica del Sián, lo que siempre implica compromisos.

En cuanto al tamaño, por ejemplo, el Countach LP400 era muy compacto, 4,2 metros aproximadamente, como un Porsche 944, y el nuevo mide 60 centímetros más, hasta los 4,87 metros.

Y cómo no resaltar la ventaja que supone su espacio interior, un gran problema en el caso del Countach original. Mitja Borkert ha tenido en el Centro Style durante años una maqueta a tamaño real del Countach: “Siempre que lo miro, se me pone la piel de gallina y me sirve como el recordatorio perfecto para mí y para todo el equipo de diseño, para diseñar cada Lamborghini del futuro de una manera visionaria y futurista.

Lamborghini Countach

Esta es una parte innegociable de nuestro ADN, la esencia si así lo desean. El primer Countach dio forma al ADN del diseño de Lamborghini como ningún otro automóvil, y el nuevo Countach traduce ese carácter poco convencional y vanguardista al futuro”.

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