Conocemos en persona el nuevo Mazda 3, precursor de la nueva era KODO

A finales de 2018 Mazda nos presentó la última generación de su compacto más vendido, todo un Mazda 3 renovado por completo y que acogerá importantes novedades dentro de la firma premium. Antes de su presentación oficial, Mazda nos ha traído al nuevo modelo a Madrid para ver en persona sus nuevos rasgos del diseño KODO.

Bajo el lema «The Feeling Factory» y en formato clandestino, escondido del ruido de la ciudad y los focos, el Mazda 3 2019 en formato 5 puertas y Sedán apareció entre luces y humo para que lo conociéramos en persona y poder verlo y sentirlo antes de probarlo. Una presentación en la que el ADN de Mazda y el diseño KODO han estado muy presentes.

Allí estuvo dando la bienvenida al Mazda 3 José María Terol, Presidente y Consejero Delegado de Mazda Automóviles España, que ha declarado que “nos encontramos en un momento histórico para Mazda, ya que supone el inicio de una nueva era con un nuevo diseño evolucionado y una tecnología revolucionaria. El nuevo Mazda3 es el primer modelo de esta generación, una referencia del segmento compacto en calidad, acabados, tecnología y equipamiento, a la altura de los más avanzados. Es un modelo que incorpora un motor único que nos refuerza en el camino hacia una variedad de tecnologías ultra eficientes que satisfaga plenamente las necesidades de nuestros clientes donde quiera que se encuentren”.

No solo eso, también estuvo dando las claves de diseño Jo Stenuit, Director de Diseño de Mazda Motor Europe- comentó las características del diseño KODO evolucionado: “hemos querido llevar la calidad del diseño al nivel del arte creando algo único. Para ello, comenzamos a concentrarnos en los diseños hechos a mano y en el lado más puro de la cultura y diseño japoneses, apostando por una estética más minimalista que elimina todos los elementos innecesarios. Para nosotros tanto el juego de luces, que hacen que parezca que el coche está en movimiento, como los colores son fundamentales. Entendemos el coche como arte, buscando una experiencia única para nuestro cliente que parte de la unión entre coche y conductor, Jinba Ittai”.

 Esta generación se inspira principalmente en dos prototipos, el Mazda Vision Coupé y el RX Vision. De ellos toma prestado el morro con caída pronunciada, unas nuevas ópticas con diseño propio y tecnología LED, o esos pasos de rueda musculoso. Su zaga es sin duda lo más cautivador, más redondeada y de superficies más limpias que antes.

El Mazda 3 en vivo gusta, y el Sedán recuerda al Mazda 6 pero es sensiblemente más corto que este. La diferencia entre ambas carrocerías además del pilar C modificado y su zaga, es que el sedán lleva los detalles exteriores en cromado en lugar de en ese gris oscuro del compacto. Además el Sedán lucía un maletero generoso y aprovechable que llega a los 450 litros de capacidad.

Por dentro todo presenta un aspecto más sencillo y minimalista, en línea con la tradición estética japonesa. Destacable la instrumentación digital y analógica, con una pantalla central circular digital que mostrará diferente información. La pantalla del sistema de información y entretenimiento queda más elevada y sobre todo mejor integrada en el salpicadero que antes, con un tamaño de 8,8 pulgadas.

En la consola central aparecen nuevos mandos y botones, todos sencillos y a buen alcance para controlar el sistema multimedia. En general la calidad percibida es buena aunque no debemos fiarnos de estas unidades que vimos en Madrid, pues eran preserie. Las plazas traseras demostraron dejar un espacio suficiente para las rodillas y la cabeza.

En cuanto a la gama de motores