Centro Porsche Barcelona Classic: cuidando la familia 911
El Centro Porsche Barcelona Classic pasó a ser el primer Porsche Classic Partner de España en 2016, convirtiéndose así en un punto de contacto competente que satisface todas las expectativas de sus clientes respecto a recambios originales y reparación, con la calidad típica de Porsche.
Desde entonces, el departamento ha ido creciendo, atendiendo a más de 500 clientes de Porsche clásico al año. Carlos Medrano, director de postventa de Centro Porsche Barcelona classic, ve claras las ventajas de tener un taller especializado en clásicos: “Cuando el vehículo clásico se trataba de igual modo que los modelos modernos, era más difícil darle al cliente ese trato más personal que demanda. A nuestro cliente de Porsche Clásico le gusta poder ver su coche “por dentro”, quiere conocer los detalles de lo que para él es más que un vehículo. Con nuestro taller de clásicos podemos tener esa dedicación y ese mimo. Son personas entusiastas, que saben mucho sobre su coche y tenemos que estar a la altura. Disponemos de una recepción exclusiva y un asesor jefe de equipo especialista en clásicos, Albert Llort, que lleva el trato con el cliente de una forma profesional y cercana”.
La magia dentro de Centro Porsche Barcelona Classic
Además del mantenimiento, también realizan restauraciones y emiten certificaciones de autenticidad, enviando a fábrica más de 100 puntos para poder ser verificados. Los modelos más habituales que pasan son los de los años 80 en adelante, pero también tienen mucho volumen los de los años 60 y 70. Carlos Medrano tiene muy claro que el conocimiento de la marca es vital: “Porsche acompaña al cliente a lo largo de la vida del vehículo. Hay que tener en cuenta que más del 80% de los Porsche fabricados, siguen circulando hoy en día. Hay talleres independientes que son buenos, pero lógicamente nosotros le añadimos ese valor de que conocemos el coche desde el principio. Trabajamos con los recambios y herramientas originales que exige la marca”.
El taller es muy amplio y luminoso, y en él encontramos verdaderas joyas a nivel mundial, como un 993 Turbo Cabrio, de los que solo se fabricaron 14 unidades. Albert Llort, por su parte, lleva veintinueve años en la empresa, de modo que conoce los coches que ahora son clásicos desde que eran nuevos. Empezó como mecánico reparando los 964 y los anteriores. Al 993 lo vio nacer: “…y ¡sigue siendo un coche espectacular!”, nos dice sonriente. Y añade: “…desde hace unos años la empresa está muy involucrada en el tema de los clásicos. Incluso contamos con trabajadores jubilados que transmiten sus conocimientos a los más jóvenes. Es emocionante…”.
Albert tiene muy claro cómo tratar a sus clientes: “Deben sentirse como en casa. Cuando un cliente entra por el taller, levantamos el coche y lo analizamos juntos (asesor y cliente). Al finalizar la reparación, el coche se prueba con el cliente para que vea lo que se le ha hecho”. En cuanto al equipo de técnicos de Classic, anualmente realizan una formación en Stuttgart (Alemania), donde se les transmite todo el conocimiento obtenido a lo largo de los años de la historia de Porsche.
Por: Javier Lorite
