Bruno Senna: entrevistamos al piloto y sobrino de la leyenda
Hemos quedado con Bruno Senna (São Paulo, Brasil, 1983) en la sede de McLaren Barcelona, un sábado por la mañana. Está en la Ciudad Condal porque el jueves acudió a la inauguración de las nuevas instalaciones de la marca británica. Viene acompañado de su novia en un discreto BMW Serie 3 de seis cilindros –no tiene distintivo de la versión en la parte trasera– azul oscuro, con matrícula de Mónaco. Pude charlar con él hace un par de años en la presentación del McLaren Senna en Estoril y me pareció un tipo simpático, sensación que se reafirma en este nuevo encuentro.
Contra lo que podría parecer, la vida de los hijos o los familiares cercanos de los genios no suele ser fácil. Tienen que lidiar toda su vida con las comparaciones, especialmente si se dedican a lo mismo que el gran ídolo. Bruno es hijo de Viviane, hermana de Ayrton, y con inteligencia y talento ha sabido construirse una carrera de largo recorrido en la élite del automovilismo mundial. Nuestro protagonista tenía 10 años y montaba en karts cuando perdió a su tío Ayrton (GP de Imola de 1994), y dos años después perdió también a su padre en un accidente de moto. Por lo tanto en su casa no querían ni oír hablar de carreras y le impidieron competir durante los diez años siguientes. Lo normal es que un parón de una década acabe con la progresión de cualquier piloto, pero Bruno consiguió destacar en la Fórmula BMW y la Fórmula 3 británica, para pasar luego a la GP2, la Fórmula 1 y actualmente el mundial de resistencia WEC (fue campeón mundial clase LMP2 en 2017).
Durante toda su carrera ha sido consciente de la responsabilidad que supone llevar su apellido, y siempre ha cuidado el legado de Ayrton y la imagen familiar. Le entrevistamos a principios de marzo, cuando se preparaba para correr en Le Mans con el Rebellion de LMP1, antes de la suspensión de las 24 Horas por la pandemia. Venía de lograr brillantes resultados este año en el campeonato WEC con el Rebellion, como la victoria en las 4 Horas de Shanghái o las Seis Horas de Austin (Texas) frente a los Toyota oficiales. Bruno se defiende en español pero prefiere hacer la entrevista en inglés.
“Hemos hecho la mayoría del campeonato WEC con un solo coche, pero en Le Mans vamos a competir con dos coches”, nos dijo.
¿Qué opina de la actual situación de Toyota en el campeonato WEC?
Bruno Senna: Es una situación complicada. De forma ideal, con el sistema de compensación (balance of performance) todos los coches deberían tener el mismo rendimiento, como dos coches del mismo equipo. Pero como los resultados evidencian que los híbridos tienen ventaja sobre los coches normales, y para que sea una competición, han tenido que igualarnos. El Toyota fue la referencia para el sistema de penalización y no lo hicieron bien, porque el Toyota ha sido más lento de lo que esperaban y eso ha perjudicado a las carreras. En algunas un coche es dominante, y en otras otro. Queremos carreras de verdad, queremos competir, que el ganador lo haga por mérito, no por cuestiones de reglamento.
¿Que le parece el museo sobre Motorsport que ha montado aquí (en McLaren Barcelona) Eduardo Costabal?
Bruno Senna: Oh, es increíble. Honestamente, cuando me habló del proyecto no esperaba que fuera tan fantástico. El jueves pude pasear y verlo con todo detalle y es impresionante, un lugar muy especial.
Eduardo nos comentó que, entre todos los pilotos de la historia, lo que más buscan los coleccionistas y lo más cotizado son los objetos de Ayrton, sus cascos y sus monos… Sí, y es que no hay muchos. La costumbre de fabricar muchos cascos para los patrocinadores, amigos, etcétera, llegó después de Ayrton. Quizá podía usar 10 cascos por temporada, y los pilotos ahora pueden tener 25. Así que es complicado encontrar cascos genuinos. Hay otros cascos que también se cotizan mucho, como los de
Michael Schumacher o Niki Lauda.
Viéndolo con los perspectiva de los años, ¿cuál cree que ha sido el legado de Ayrton para el mundo Bruno?
Bruno Senna: Fue el tipo de deportista que trascendió las fronteras del deporte. Obviamente fue tremendamente exitoso, y elevó al automovilismo a un nivel realmente alto, convirtiéndose en una leyenda. Pero con su carisma, su carácter, su estilo de vida, también inspiró a personas que no estaban especialmente interesadas en las carreras. Y en su legado destaca además la Ayrton Senna Foundation, creada por mi madre, porque Ayrton antes de morir le dijo a ella que quería montar algo para ayudar a Brasil y a los niños pobres de nuestro país. Quería que tuvieran educación y una oportunidad en la vida. La fundación lleva más de 25 años trabajando en ello y más de 20 millones de niños se han beneficiado.
Ayrton decía que a veces, cuando estaba conduciendo, vivía una especie de experiencia mística, divina. ¿Era realmente así o es una exageración?
Bruno Senna: Ayrton era una persona muy religiosa, siempre llevaba la Biblia con él y en nuestra familia somos muy creyentes. Creo que él realmente encontró una conexión, quizá no funcionaba a un nivel consciente, era algo más instintivo y trascendente. La experiencia de conducir un coche de carreras puede llegar a ser algo muy especial.
Grandes toreros hablan de experiencias similares, cuando se olvidan de la técnica, del miedo y hasta de sí mismos, no piensan sino que sienten. Cuando estás in the zone, como lo llaman, con todo saliendo de una forma natural, sin pensar, es una sensación increíble. Todo sale automáticamente, y es cierto que ocurre pocas veces, pero es algo fantástico.
¿Cuáles cree que fueron las carreras más brillantes de Ayrton?
Bruno Senna: Es difícil, por supuesto habría que hablar de Mónaco 84 con el Toleman, cuando todo el mundo descubrió su enorme talento; Estoril 85 con el Lotus bajo la lluvia, o cuando ganó en Interlagos en 1991 por primera vez. También fueron grandes victorias Donington o Interlagos en 1993, una temporada en que su McLaren-Ford estaba claramente por debajo del Williams. También en Silverstone hizo una gran carrera, en la lucha con Prost y Schumacher. Consiguió superar a los Williams varias veces, no solo en lluvia. Creo que en 1993 condujo a una altura increíble, no solo en clasificación, donde siempre fue genial. Condujo con la agresividad de sus inicios combinada con mucha más experiencia. Quizá fue su momento cumbre –aquella temporada terminó el campeonato segundo tras Prost y su Williams.
Creo que tiene un McLaren Senna, con la carrocería de carbono lacado y detalles amarillos. ¿Lo conduce con frecuencia?
Bruno Senna: Sí, es el coche que se expuso en el Salón de Ginebra, lo tengo en Mónaco. Y tenemos otro en Brasil. Sí lo uso, lógicamente no es el coche más cómodo para viajar, pero he ido varias veces con él al circuito de Paul Ricard y volveré pronto porque tenemos unos test allí. Solo tengo que asegurarme de que no lloverá, porque a los neumáticos que lleva no les gusta la lluvia.
¿Tienen en la familia algún monoplaza de Ayrton Senna?
Bruno Senna: Sí, tenemos tres. El Lotus del 85, un Lotus replica de 1987 y el McLaren de 1990. Quizá no tantos como deberíamos pero bueno, en Brasil es muy difícil mantener este tipo de monoplazas listos para funcionar, no hay especialistas y es muy caro, así que están de exposición. También tenemos varios de sus coches de calle, el Honda NSX (lee nuestra prueba de su última iteración), el primer Audi S4 que llegó a Brasil, un Mercedes Clase C muy raro…
¿Bruno Cómo están funcionando los deportivos McLaren en Brasil? ¿Los aficionados sienten la marca como propia de alguna manera?
Bruno Senna: Sorprendentemente bien. Brasil es un mercado interesante, porque es enorme, pero la mayoría de los ricos del país tienen casas en Europa o Estados Unidos, y normalmente tienen allí los McLaren. Yo no estaba muy convencido de las posibilidades de McLaren en Brasil, porque incluso Ferrari no vende mucho allí. Pero sé que los clientes brasileños de McLaren están encantados con sus coches, y que hay un verdadero culto a la marca por su relación con Ayrton, y también, por supuesto, por su calidad. En todo el mundo McLaren está compitiendo con éxito con marcas que llevan mucho tiempo en el mercado, y están en la vanguardia en cuanto a tecnología. Hace poco me llamó el mánager de mercado global para decirme que estaba muy contento con las ventas del concesionario de São Paulo.
¿Podemos esperar una nueva generación Senna que siga la tradición de pilotos en la familia Bruno?
Bruno Senna: Mis dos hermanas tienen dos niños cada una, y el mayor tiene tres años creo, así que es pronto aun para saberlo. Yo aún no me he casado, así que ya veremos. El automovilismo es complicado, ha cambiado mucho respecto a como era hace años, y también la percepción de la gente respecto al automóvil, la pasión por las carreras, etcétera, veremos como evoluciona.
