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Audi RS Q3 vs Porsche Macan S: Espíritu Quattro

Los alrededores de Yorkshire vibraron una vez con el paso de los Quattro por el rally RAC. ¿Podrá el nuevo Audi RS Q3 reavivar esa magia de los cinco cilindros mientras de paso hace frente al Porche Macan?

Es 1981. estás de pie en un bosque al lado de un camino de grava, mientras tomas el té decantado de un termo en una taza de Charles y Diana, esperando con entusiasmo el silbato del mariscal. Es hora del RAC y el ganador del año pasado, Henri Toivonen, no decepciona y te golpea con la arena mientras pasa en su Talbot Sunbeam Lotus. El próximo coche es más silencioso, ordenado, menos emocionante. No hay un sobreviraje espeluznante, ningún drama, solo un avance implacable hacia adelante. Incluso antes de que Hannu Mikkola haya regresado a casa en primer lugar, después de haber volcado en el camino, los fanáticos de los rallyes británicos, que dan su primer vistazo a este automóvil bien armado, no tienen ninguna duda de que el futuro son las cuatro ruedas motrices.

Pero, cuarenta años después de su presentación en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1980, la influencia del Quattro sigue viva. Además de cambiar el curso de los rallyes y los coches de alto rendimiento, ayudó a reinventar a Audi como un fabricante de máquinas entusiastas extremadamente rápidas, sofisticadas y seguras. Y ahora quiere hacer muchos más de ellos. La división de alto rendimiento de la marca alemana, Audi Sport, quiere duplicar las ventas de sus modelos S, R y RS para 2023. Y no va a hacer eso reduciendo a la mitad la hora del almuerzo en la línea del R8… Necesita más coches y automóviles más asequibles, al igual que este RS Q3 que estamos utilizando para detectar algunas carreteras excelentes en North Yorkshire, cerca de la ruta del rally RAC del año 1981.

Asequible, en este caso, es un término relativo. El RS Q3 proviene del mismo conjunto de componentes de diseño transversal, de la plataforma MQB, que el veloz RS3. En sí mismo no es barato, superando los 70.000 euros. Pero elevar el nivel eleva el precio. Un RS Q3 Sportback estándar cuesta 74.810 euros. Y eso es solo el comienzo. Aunque te dan las llantas de 20 pulgadas, instrumentación digital Virtual Cockpit y un conjunto sólido de dispositivos de seguridad, no hay luces Matrix Led, cámara de marcha atrás o cargador de teléfono inalámbrico. Podrías sacrificar esa caída sexy de la luna trasera e ir por el Audi Q3 que no es Sportback lanzado simultáneamente. Pero pierde una gran cantidad de espectacularidad visual y no gana mucho en términos de practicidad: el espacio de carga en el maletero es el mismo, 530 litros, aunque el RS Q3 ordinario obtiene 125 litros más si abaten los asientos y lo cargas hasta el techo. El ahorro es de 2.100 euros en este caso.

Audi RS Q3

Si la idea de pagar lo que cuesta un Cayman S por un crossover compacto te deja frío, te puedes descongelar un poco cuando se te pone al lado algo con tanta presencia en la carretera. El morro, con esa boca abierta de rejilla de panal, parece que podría devorarte por completo. Pon en marcha el motor turboalimentado y sabes que eso no es todo lo que el pequeño musculado quiere comer. Habiendo subido pacientemente por la autovía desde la oficina de CAR UK, en Peterborough, en busca de caminos decentes, comenzará devorando Blakey Ridge, un tramo de asfalto enormemente rápido. El Audi RS Q3 nos incita a aumentar la velocidad, pero está listo con algunas sorpresas que fácilmente podrían verte patinar por la ladera cubierta de hierba si te equivocas. Y hoy, al igual que las etapas especiales del RAC 81, estamos corriendo sin cuaderno de notas.

Tan ágil como un compacto deportivo

El Audi RS Q3 entrega 400 CV en comparación con los 343 del anterior, y hace que puedas ir más rápido que un compacto deportivo por estas carreteras. Los números de Audi hablan de 4,5 segundos para llegar a los 100 km/h, pero la respuesta es tan inmediata del rango bajo al medio que se siente aún más rápido, alejándose fácilmente de otros coches a los que adelantamos, saliendo de las curvas más cerradas, y sin ninguna pelea con el agarre gracias al sistema de tracción a las cuatro ruedas con Haldex. La velocidad máxima es de 250 km/h, aunque puede deslimitarse a 280 km/h si está buscando equipar la opción menos recomendada por la DGT.

La capacidad del RS Q3 de sobrepasar el suelo obscenamente rápido, y no solo en línea recta, es obvia antes de colocar la cuarta marcha en una caja obligatoria de doble embrague, que hace la mayoría de las cosas bien. Este RS es rápido, muerde agresivamente mientras gira la rueda sin dar mucha sensación a través de los dedos. Y si queremos que el viaje sea eficaz a la par que cómodo, mejor llevar los amortiguadores adaptativos opcionales. Pero es divertido ejercitarse a través de las transiciones a gran velocidad gracias a su gran agarre y control sólido de la carrocería, y los frenos de seis pistones son impasibles ante cualquier tipo de abuso.

Llega la competencia

¿Pero es realmente bueno por ese precio? En este segmento tan grande inmediatamente pensamos en otros rivales, nuestro favorito, el Porsche Macan. El Turbo llega a los 100 km/h desde parado en los mismos 4,5 segundos que necesita el Audi pero, a 106.000 euros, podemos meter muchos extras sin miedo en nuestro RS Q3.

Pero, ¿qué pasa con el Macan S que hemos traído para probar el RS? Con un precio de 76.100 euros, es tan caro como nuestro RS Q3 y, debido a que se basa en la misma plataforma que el hermano mayor del Q3, el Q5, es notablemente más grande por dentro, aunque extrañamente, el maletero es algo más pequeño. Un reciente restyling no cambió casi nada en la parte delantera del Macan, pero agregó las nuevas luces traseras corporativas unidas, un atractivo sistema multimedia con pantalla táctil de gran tamaño y un nuevo V6 biturbo de 354 CV bajo el todavía precioso capó. Sabemos lo que estás pensando: “¿354 CV?”. Más metal y menos músculo significan inevitablemente que el Porsche es más lento que el Audi. Necesita 5,1 segundos para alcanzar los 100 km/h, o 5,3 segundos si está demasiado apretado para pagar el paquete opcional Sport Chrono, que incluye Launch Control y un cronómetro analógico. La disparidad de rendimiento es más evidente a velocidades más bajas, donde una patada al gas empuja al Audi hacia adelante con una agudeza que el Porsche no puede igualar. A velocidades más altas del motor, el Porsche trabaja más duro, recompensando las revoluciones con una patada satisfactoria en la parte posterior, siempre alentándolo a que se revolucione de inmediato. Eso lo hace sentir más deportivo, o así debería. Pero es un motor sorprendentemente apacible, sobre todo si te enfrentas a algo tan característico como el cinco en línea de Audi. Y es que el sonido del Audi RS Q3, a pesar de su filtro de partículas, es embriagador, y eso que el Porsche lleva un cilindro más.

Pero el Porsche nos ofrece una sensación de dirección mucho mejor; sensación real que te conecta y te involucra, sea cual sea el número en el velocímetro. Se adapta las curvas sin problemas y con más equilibrio, y se mueve mejor. Cada vez que salimos de una curva sentimos trabajar el diferencial central, capaz de enviar hasta el 85% de sus 480 Nm a las ruedas traseras, un sistema que puede reaccionar según el ángulo del volante para meter el par atrás y matar al subviraje cuando se gira en una curva.

Llega la hora de la despedida

En este sentido, el Porsche es el que más logra sentirse como un GT grande en zapatos de plataforma. Nos despedimos del Porsche y ponemos rumbo al Este, hasta Scarborough. Con el ritmo más bajo, nos fijamos en el interior, espacioso y aún con botones giratorios para el climatizador, que contrasta mucho con la pantalla superior, pero que funciona bien. En definitiva, el RS Q3 no será el SUV compacto rápido definitivo, pero tiene su atractivo. Este se debe en gran medida al motor de cinco cilindros. Le da al Audi algo de carácter real y un punto de diferenciación con sus rivales, además de una excelente banda sonora y un ritmo endiablado para ayudar a compensar el excelente chasis del Macan. Disfrútelo mientras pueda, porque, como las tardes de juego en las máquinas recreativas o los paseos para obtener el mejor lugar para ver el RAC, no estará para siempre.

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