Zenith El Primero Chronomaster 1969 Svra

Esta maravilla nace de la asociación con uno de los clubes más emblemáticos de las carreras vintage, el SVRA (Sport Vintage Racing Association).

Este club norteamericano ha organizado durante este año 16 carreras por todo lo largo y ancho del país en circuitos tan emblemáticos como Indianápolis, Watkins Glen o Sonoma, al norte de San Francisco. El reloj creado por Zenith tiene un aire marcadamente retro, pero sin perder un ápice la esencia del Cronógrafo El Primero.

Dicho crono, que ya forma parte de la historia, nació por la necesidad de hacer mediciones más exactas. La mayoría de los cronógrafos –y relojes mecánicos– tienen una alternancia de 28.800 vibraciones por hora, o sea 480 por minuto que es lo mismo que 8 por segundo. Y las mediciones de cualquier evento deportivo se miden por décimas de segundo. Pues bien, Zenith se puso manos a la obra para crear un movimiento, totalmente nuevo, que fuera capaz de funcionar a 36.000 alt/H, o sea a 10 por segundo, para poder así medir con precisión las décimas de segundo. Y en 1969, nació el primero, valga la redundancia de los Cronógrafos El Primero,  ganando multitud de premios y siendo hoy en día un hito muy importante en la relojería mundial.

Se trata de una edición limitada a 100 unidades con caja de acero de 42 mm, esfera blanca con el logo de la SVRA a las 6, y correa de caimán,  cosida a mano con las costuras en amarillo, y triple cierre desplegable. Cuenta con un cristal de zafiro abombado, y cristal de zafiro en el fondo que permite admirar el mecanismo El  Primero en pleno funcionamiento. El precio no se ha hecho oficial.