Subastas de verano: el top 10 de las ventas más caras

Los eventos en Monterey se han suspendido, pero las subastas de verano de RM y Bonhams demuestran que muchos siguen locos por comprar:

Ferrari 550 GT1 (2001)

Salieron de fábrica muchos 550 Maranello, pero este es especial. Forma parte de una serie de 10 coches encargados por Care Racing Development a Prodrive. Para esta versión de carreras se aumentó la cilindrada de 5.5 a 6 litros, se cambió la caja manual por una secuencial y se redujo el peso en 550 kg. Eran para el campeonato FIA GT y las American Le Mans Series. 3.627.200 euros en las subastas de verano online de RM Sotheby’s.

P. 718 RSK Spyder (1959)

Solo se fabricaron 34 unidades de este Porsche de competición, llamado “matagigantes” por su capacidad de vencer a coches más pesados y potentes. Fue el sucesor del mítico 550 RS, y esta unidad que venció el Governors Trophy de la Bahamas Speed Week de 1959, ha estado casi 50 años en manos de su tercer propietario. 1.887.500 euros en las subastas de verano Bonhams.

Ferrari 275 GTB (1965)

Uno de los Ferrari clásicos más deseados, con su V12 de 3.3 litros. Este es de la primera serie, de morro corto, de los que se produjeron unas 250 unidades. Este chasis 06891 fue restaurado recientemente y pintado en rosso barchetta, aunque salió de fábrica en color gris. Es espectacular hasta la matrícula californiana: “275GTB”. 1.673.900 euros en RM.

Pagani Huayra (2014)

Ningún superdeportivo moderno aúna belleza, arte, tecnología y artesanía como el Pagani, y los coleccionistas lo saben. Este Huayra es el número
56 de los 100 cupés fabricados entre 2011 y 2018. Con su motor AMG
6.0 V12 biturbo de 730 CV y su carrocería de fibra de carbono lacada, solo tiene 5.500 millas en el contador. 1.562.300 euros en RM.

Bugatti Veyron G. S. (2014)

Se trata de un Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse con 1.200 CV, uno de los tres producidos de la edición especial “Meo Constantini”, con los colores del clásico Type 35, y el único con especificaciones USA. Además está totalmente nuevo, con solo 400 millas en el contador. Esperemos que el nuevo dueño lo disfrute más. 1.478.900 euros en Bonhams.

Ferrari F40 (1991)

El coche de Maranello más admirado de los noventa llevaba un V8 3.0 biturbo de 478 CV y no necesita presentación. De los 1.300 que se fabricaron, muchos se han perdido en accidentes y solo se vendieron 213 en EE UU. Este, con matrícula de Florida, está virtualmente nuevo, con solo 6.407 millas en el contador. 1.171.300 euros en RM.

P. deluxe Eight (1932)

Los Packard más admirados de los años treinta son los llamados Dietrich –este era el nombre del diseñador y carrocero– Individual Custom, fabricados sobre chasis Super Eight y Twelve entre 1932 y 1934. Este Eight Individual Convertible Victoria by Dietrich fue restaurado por completo en 2017 y solo quedan tres más como él. 892.245 euros en RM.

M. 300 SL Roadster (1960)

Clásico entre los clásicos, no suelen faltar en las subastas de alto nivel. Uno de los pocos casos en los que se cotiza más el cupé (Gullwing) que el roadster. Esta unidad dispone de techo duro de origen, fue vendida nueva en Milán y su siguiente propietario fue un estadounidense que la conservó desde 1961 hasta su muerte en 2000. 882.951 euros en RM.

Porsche 916 (1972)

Parece un 914/6 pero no lo es. Lo desarrolló Ferdinand Piëch para competir con el Ferrari Dino, y tras fabricar 10 protos –los tres primeros 2.4 y el resto con el 2.7 de 210 CV– el proyecto se canceló por su alto coste. Este fue el primero y se lo quedó Louise Piëch, hermana del genio. Llevaba techo fijo de acero, no targa. 808.444 euros en RM.

BMW M1 Procar (1980)

Si un fabricante quería competir en Gr. 4 debía producir al menos 400 unidades. Diseñado por Giugiaro, el M1 llevaba un motor central de 3.5 litros y seis cilindros de 277 CV. Se construyeron solo 455 unidades, 399 de calle y 56 de carreras, y este es uno de ellos, que participó en el campeonato IMSA GTO. También hubo un campeonato Procar monomarca, con los pilotos de F1. 771.274 euros en RM.