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Prueba Volvo S60 T5, excelencia y confort

Los suecos quieren hacerse su hueco entre el denominado «establishment» alemán y en los últimos años lo han logrado con unos modelos enfocados en la calidad, la elegancia de su diseño y sobre todo una conducción enfocada en el mayor confort posible. Este Volvo S60 T5 es su formato más compacto de berlina con todos esos atributos.

Como sabrás, los suecos están más comprometidos que nadie con la construcción de un futuro sostenible. Tanto es así que para esta berlina no tan compacta de 4,76 metros de largo han prescindido de mecánicas diésel. No os preocupéis, sigue habiendo motores diésel en los modelos más grandes.

Prueba Volvo S60 T5 3 cuartos trasera

Potencia con cuatro cilindros

Esto nos deja con el S60 T4 como versión de acceso con 190 CV. Podría parecer una opción sensata, y lo es, pero si queremos ir sobrados, y sobre todo como a la marca le gusta, más seguros, a la hora de hacer adelantamientos o incorporaciones, este Volvo S60 T5 será nuestra mejor baza.

Prueba Volvo S60 T5 motor

Como todos los modelos de la casa, usa un motor de cuatro cilindros turbo apretado en mayor o menor medida para mover esta elegante carrocería fruto de los trazos de un departamento de diseño que tiene un hueco bien ganado en el sector. Son 250 CV y 350 Nm que se notan, al menos en el marcador.

Y es que si hay algo que hace muy bien este Volvo S60 T5 es llevarnos por el camino con una celeridad discreta. El chasis y el conjunto mecánico trabajan con el silencio de una biblioteca, escandinava en este caso que seguro es aún más silenciosa, y con un paso por curva enfocado al total beneplácito de sus cuatro o cinco ocupantes.

Prueba Volvo S60 T5 carretera

Podría parecer por sus cifras de potencia que es una berlina de corte deportivo, pero que sus 6,5 segundos en el 0 a 100 km/h no te engañen, podrás ir rápido pero después de unos kilómetros te preguntarás para qué, si has elegido este coche porque te transmite un placer sensorial de viajar sin preocupaciones.

Prueba Volvo S60 T5 trasera carretera

Y ese es el fuerte del S60, ir con la misma tranquilidad al volante que el resto de rivales alemanes, sabiendo por un lado que tienes potencia de sobra con esta versión, y por el otro notando como se mueve con una clase y soltura dignas de un coche premium de este nivel. Porque el Volvo S60 2019 más barato son 41.000 euros, 48.000 en el caso de nuestra unidad por motor y nivel de acabado.

Y es que llevamos el R-Design, sin duda nuestro favorito en la casa sueca. Un nivel que nos dota de paragolpes más deportivos en el exterior, una parrilla de lamas verticales, grandes llantas desde 18″ de serie, 19 en este caso, doble salida de escape rectangular y retrovisores en negro.

Interior premium de verdad

A bordo en cambio tenemos cuero, molduras elegantes, materiales nobles, pero siempre podemos llevarlo más allá y hasta pedir fibra de carbono. Por suerte aquí tenemos los detalles del salpicadero y el túnel central en aluminio.

Su espacio interior es bueno, digno de su clase y de una compañía donde la estatura media debe ser alta. Además la tecnología está muy presente tanto en pantallas, llevamos instrumentación digital y la habitual tablet vertical en la consola central, como en asistencia de conducción. Todo es manejable desde la pantalla central con menús de acceso rápido. También hay espacio en el maletero, 442 litros, aunque no es el mejor del segmento.

No tan rápido es cambiar la climatización, ya sea cambiar la temperatura o apagarla se debe hacer desde la pantalla, y eso a veces dificulta la concentración al volante.

En cambio nos asombra siempre la calidad del equipo de audio, aquí el opcional de Harman Kardon, con múltiples modos de ecualización y un buen nivel de personalización.

Automáticamente cómodo

Volvamos al volante. Volvo ya solo usa transmisión automática, un cambio de convertidor de par sobresaliente para el carácter del coche, de esos que funcionan con mucho disimulo, pero por suerte los suecos nos dejan elegir con unas elegantes levas en el volante. Son algo minimalistas pero funcionan de maravilla, aunque los cambios ascendentes son más rápidos que los descendentes.

El paso por curva del Volvo S60 T5 es controlable, no te va a traicionar, se va a ir de morro si lo fuerzas como buen tracción delantera, pero la zaga no hace ningún extraño al corregir. Su límite quizás esté más próximo que el de otros rivales, pero como ya hemos dicho, su conducción precisa y cómoda no nos invitará a ir a conocerlo, antes querremos ir a ver a la suegra, y si es en este elegante coche sueco, mejor.

Para el día a día es un coche con un consumo que debido al motor que llevamos no será tan eficiente como sus rivales alemanes diésel. La marca homologa 7,1 litros para este Volvo S60 T5, y lo cierto es que siempre rondamos los 9 o 10 l/100 km.

Veredicto

Así que tenemos un coche rápido, pero con el que preferiremos ir tranquilos disfrutando de la conducción. Un coche cómodo, pero porque sus múltiples asistentes nos pueden llevar casi sin que hagamos nada más allá de apoyar dos dedos en el volante. Y un coche con mucho estilo propio, pero que tiene su precio si lo que queremos son grandes llantas y una parrilla diferente. El Volvo S60 T5 nada tiene que envidiar a sus rivales alemanes. Quizás solo un motor diésel con el que viajar por menos…

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