Prueba Lamborghini Huracán Sterrato, Toroterreno
Prueba Lamborghini Huracán Sterrato, Toroterreno
Escrito el 06 de enero de 2020
En un oscuro rincón de la factoría de Lamborghini, lejos de los controllers del Grupo VW, el diseñador jefe Mitja Borkert y el ingeniero Rouven Mohr crearon un proyecto secreto denominado Huracán Sterrato.
Basado en el Huracán Coupé, es el prototipo más extremo nacido en las instalaciones de Sant’Agata, en Italia, desde el lanzamiento del Egoísta monoplaza de 2013. Basta con mirarlo para pensar que por sus venas corre el mismo ADN del Porsche 959 Grupo B del París-Dakar o del Audi Quattro S1. El Sterrato es oficialmente un modelo único, un ejercicio de estilo. Pero en realidad ha sido concebido como un modelo de producción limitada y de alto precio que podría salir al mercado en 2021. Según se rumorea, el plan es producir entre 500 y 1.000 unidades, a unos 240.000 euros cada una.
A primera vista resulta impactante, no lo olvidas rápidamente. Te recuerda a los juguetes de Hot Wheels, Tonka, Transformers… “En el mercado de los deportivos lo más importante son las emociones”, nos dice Borkert, “y esto es lo que ofrece el Sterrato en abundancia”. Y, ¿por qué las pegatinas, las luces adicionales tipo raid en el desierto o los pasos de rueda negros? Y la respuesta no puede ser más clara: “¡Porque podemos!”.
Hechos a medida
Como hacen otros fabricantes de lujo, Lamborghini pondría a disposición de los clientes a su departamento de pedidos especiales, de modo que los clientes configurarían los coches a su gusto. El concepto Sterrato es audaz y valiente, y sin duda nos sorprenderemos de lo que podrá salir de aquí.
La siguiente pregunta por supuesto es: ¿qué se siente al volante? Y para descubrirlo nos fuimos hasta el circuito de Nardo, para rodar tanto sobre asfalto como sobre la desafiante pista de tierra Strada Bianca.
El Sterrato parece un Huracán que ha sido manipulado genéticamente con ADN de un WRC. La distancia al suelo aumenta en 47 mm y las vías son 30 mm más anchas en cada eje. El spoiler delantero ha sido reforzado y lleva una gran placa protectora inferior, y la parte posterior está más despejada y también monta una placa protectora.
Los neumáticos, hechos a medida, tienen los flancos menos rígidos, y las llantas que lleva nuestro coche son unas BBS negras diferentes a las que montaba el Sterrato en las primeras fotos que se difundieron. El dorsal 63 se debe al año en que la firma fue fundada y, en definitiva, tenemos delante una curiosa mezcla de estilo, postureo, sorpresa y talento.
Subir al coche es más fácil gracias a la amplia apertura de las puertas y a la altura adicional. Te acomodas en un nuevo asiento tipo bácquet con cinturones de cuatro puntos de anclaje, aunque más allá de las barras antivuelco y las placas de aluminio en el suelo, todo nos resulta familiar. Como el reciente Huracán Evo, el Sterrato incorpora el motor V10 de 640 CV que estrenó el Performante.
Esta mecánica atmosférica de 5.2 litros transmite el par a las cuatro ruedas a través de un cambio de doble embrague y siete velocidades. El par máximo se alcanza a 6.500 rpm y la potencia máxima a 8.000 revoluciones, aunque puedes ver llegar la aguja hasta las 8.500 rpm. Es una mecánica maravillosa para un coche destinado al asfalto y a los circuitos, pero vamos a ver cómo funciona colocada a mayor altura y con unos reglajes de suspensión más suaves.
Matando insectos de lado a lado con el Huracán Sterrato
Empezamos sobre el asfalto y, cuando el semáforo se pone en verde, el probador del la marca Nicolo Piancastelli sale primero en un Huracán Evo de serie. Hacemos dos vueltas en modo “Corsa” y después, siguiendo sus instrucciones, desconectamos el control de estabilidad “ESP”. Desde ese momento empezamos a matar insectos con las ventanillas laterales. Es una experiencia apasionante, pero también exigente. Las llantas BBS montan unas gomas especiales de medida 255/45 ZR20 y traseras de 305/45 ZR20, lo que junto a una suspensión más suave y con mayor recorrido que en el Huracán de serie, cambian el comportamiento del coche. En los baches y oscilaciones, los amortiguadores y los neumáticos más acolchados transmiten el efecto compresión hasta tu estómago.
Y cuando los radios de las curvas se cierran es fácil hacer largas derrapadas. Hacer drifting en cuarta y a 120 km/h es una experiencia única. La adrenalina se dispara cada vez que llego a un giro en subida o al final de la curva más rápida. El sistema 4×4 Haldex de quinta generación ha sido recalibrado para el Sterrato. Normalmente manda más par al eje trasero, pero si quieres salir rápido de una curva de segunda, envía par adicional al eje delantero. El resultado es un coche con más facilidad para derrapar en circuito que el Performante y a la vez, igual de competente que el Urus en arena o grava. Respecto al motor, concebido para rendir sobre todo a altas revoluciones y sin ser sobrealimentado, sigue ofreciendo mucho par con el que salir disparado a la salida de las curvas.
También hay que decir que el neumático y la suspensión diferentes alargan un poco la distancia de frenado, que como es normal también se alarga ligeramente cuando los frenos alcanzan mucha temperatura. Como el Huracán Evo, el Sterrato también incorpora el LVDI (Lamborghini Dinamica Veicolo Integrata). Reprogramado para este coche, el sistema controla ABS, ASR, y ESP junto al sistema AWD, torque vectoring, ajuste de la suspensión y dirección delantera y trasera.
Cambiamos el asfalto por la tierra: a jugar con el Huracán Sterrato
Logicamente, en el circuito el Sterrato no se comporta al mismo nivel que un Huracán pensado solo para el asfalto, aunque acelera de 0 a 100 km/h en 3,1 segundos, solo dos décimas menos que un Evo. La velocidad máxima es de 302 km/h, lo cual no está mal para un coche que puede ir por arena o nieve. Durante la comida, el ingeniero Maurizio Regianni nos habló libremente sobre la posibilidad de que llegue a los concesionarios: “El análisis provisional de rentabilidad sugiere que podríamos fabricar este coche y tener beneficios.
Esto sería posible gracias a fabricar todas las nuevas piezas de la carrocería mediante impresoras 3D. Para ello hemos desarrollado un material sintético muy ligero que puede ser atornillado a la carrocería. La idea de crear este coche nació en Nardo, cuando teníamos junto al Urus y al Huracán, y el Sterrato es un Huracán con habilidades de crossover”.
Llega el momento de ir a la pista de tierra, el lugar donde fue puesto a punto el Urus con rocas y varios tipos de grava y arena. Carlo della Casa, el nuevo director técnico de la marca llegado desde McLaren, nos dice que no nos preocupemos, “puede aguantar algo de maltrato, y te garantizo que vas a disfrutar mucho”. Después de una sola vuelta de reconocimiento, desconecto el “ESP” y abro bien los ojos porque parece una situación propicia para el desastre.
No se ajusta la altura al suelo y Nicolo me insiste en que confíe y conduzca tan rápido como pueda. Una hora después estoy tan emocionado con el Sterrato que casi necesitan una palanca para sacarme de él, es excepcionalmente divertido. Al acelerar en curva, los derrapajes son inmediatos. Y mejor aun si antes de entrar lo balanceas para entrar ya cruzado. Entonces gas a fondo durante el radio, con el eje delantero también traccionando.
En una vuelta tienes la piel de gallina, en tres vueltas te sientes un héroe, el mundo de los rallyes ha perdido a un genio del volante con tu ausencia en el mundial… A la quinta vuelta eres un adicto. Este coche tiene muchas aspectos de los que disfrutar. Más divertido que sus hermanos pensados para el asfalto, y con una altura adicional que le convierte en un coche más práctico en invierno que el clásico supercar.
Y suponemos que en Oriente Medio encontrarán la forma de elevarlo aun más, ponerle neumáticos de tacos y dedicarse a subir por las dunas. Solo podríamos criticarle la previsible durabilidad de los pasos de rueda, la tapa del motor que reduce mucho la visibilidad hacia atrás y el excesivo sonido interior, aspectos todos ellos fáciles de solucionar de cara a la producción en serie.
Una apuesta brillante
El Sterrato es una brillante muestra de lo que Lamborghini puede hacer de cara a reafirmar su posición dentro del Grupo VW, creando coches absolutamente excitantes y sin rivales, que muestren la audacia de la marca en cuanto a excelencia dinámica. ¿Es el Sterrato una locura? Por supuesto, pero la mayor locura sería que no llegara a producirse en serie.