Prueba Audi RS Q8 2020, coloso de las prestaciones
Prueba Audi RS Q8 2020, coloso de las prestaciones
Este es el RS más grande que haya preparado Audi Sport hasta la fecha, porque no, nunca llegó a haber un RS Q7, y después de probar este Audi RS Q8, no lo echaremos en falta, y entendemos la espera para producir el más grande de los RS de Audi. ¿Demasiado grande o demasiado tarde? Puede que ahora todo cobre sentido.
¿Que aportan las siglas RS en el RS Q8?
Audi Sport ha hecho una mejora de lo que había hasta ahora como modelo más deportivo del SUV coupé, es decir, coger al SQ8 y sustituir su V8 diésel por el del nuevo RS 6 Avant y calibrar todos sus trucos tecnológicos a los estándares RS, así como darle un look más agresivo, si es que se puede en un coche que ya luce muy deportivo de serie.
Y es que por lo general los modelos RS llevan una carrocería nueva ensanchada, aportando un cambio bastante notable. Aquí el ojo experto tendrá dificultades de lejos para saber si es un RS Q8 o un simple Q8, ya que solo pasa de 1.995 mm de ancho a 1.998 mm. Literalmente no cabía una carrocería más ancha en la cadena de producción de Audi, algo que agradecemos en las sinuosas y a veces estrechas carreteras de la isla de Tenerife.
No faltan los nuevos detalles como las tomas de aire en la parte inferior del capó, un guiño al Audi quattro, paragolpes algo más agresivos, llantas específicas de 22 pulgadas de serie, y de 23 en opción, paragolpes trasero con doble salida de escape ovalada y un difusor más prominente.
Dentro los cambios son unos nuevos asientos deportivos con reposacabezas integrados y el logo RS en ellos, el volante achatado de cuero perforado, los listones de los umbrales de las puertas con el nombre del modelo, o una tapicería exclusiva. Si queremos podemos darle un toque aún más deportivo con el paquete de diseño RS, con el que las costuras pueden ser rojas o grises, y se forra en Alcantara el volante y la palanca de cambios. También podemos pedir ciertas molduras en carbono y añadir más cuero.
¿Qué cambia con un SQ8?
Mucho. Empezando por el propulsor. El V8 de este Audi RS Q8 es el de 4.0 litros biturbo que han estrenado los RS 6 y RS 7 nuevos, con 600 CV y 800 Nm de par. Sobra decir que hundir el pie a fondo con estas cifras a tu disposición es desatar una fuerza de la ingeniería descomunal. No es su cifra de potencia, sino lo pronto que llega el par lo que nos catapulta, pues a partir de 2.500 rpm tenemos esos 800 Nm de par empujándonos tanto que si no llevamos cuidado en nuestra prueba acabaremos en la isla de al lado.
Por lo demás, llevamos el eficaz cambio tipronic de 8 velocidades, la tracción quattro de serie, un diferencial central para repartir el par normalmente en un 40:60, eje trasero direccional y suspensión neumática. Sin embargo, en opción Audi Sport nos brinda el diferencial deportivo trasero y el sistema activo de estabilización de la carrocería gracias al sistema de 48V al que va ligado el motor. Olvídate de la fibra de carbono en la parrilla singleframe o en la consola central, en esto es en lo que tienes que gastarte el dinero en extras. No lo hemos probado sin estos elementos, pero con ellos, surcar el asfalto a fondo es una maravilla.
Podría parecer que pilotar con decisión el Audi RS Q8 sería como bailar con un luchador de sumo, sin embargo se parece más a hacerlo con un boxeador de peso pesado, sabes que te llevará de un lado a otro con contundencia pero que no te hará despegar los pies del suelo. Todos los elementos que Audi Sport despliega están perfectamente calibrados para que, a la hora de llevar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos sus 2.400 kilos de peso, tengas total confianza.
La misma que generan sus frenos carbocerámicos. También son una opción, y ya no se nos ocurre que más caprichos quitar para pagarlos, pero su eficacia está más garantizada que la de las pastillas azules para hacer el amor. El tacto es lo suficientemente suave en conducción normal como para no acordarte que los llevas, pero cuando quieres retar a las leyes de la física están ahí como un guardaespaldas, atento al mínimo toque para detenerte, y nunca fallan, siempre alerta, siempre eficaces. Para ello, las pinzas son de 10 pistones en ambos ejes, y los discos son de 440 mm delante y 370 mm detrás. Además aportan a la dieta, porque reducen 34 kg de masa no suspendida.
¿Es todavía un Q8?
Podría parecer que este Audi RS Q8 es una fiera salvaje indómita, pero nada más lejos de la realidad. Si algo caracteriza a los modelos de la familia RS, es que siempre que queramos pueden ser ese coche fiable, cómodo, sereno y de calidad que se diseña en Ingolstadt. En modo Comfort podríamos recorrer la isla de punta a punta, para después pasar a Dynamic y subir como un rayo a la cumbre del Teide, o bajar en Efficency con solo 4 cilindros funcionando.
Y hay más, porque no perdemos los modos Offroad y Allroad, aunque a nosotros se nos puso la piel de gallina cuando tuvimos que meter las llantas de 23″ entre las piedras volcánicas para grabar la entradilla de la videoprueba. Y la novedad son los modos RS1 y RS2. A ellos accedemos desde el botón del volante, y son configurables desde el sistema multimedia MMI touch response.
Así podemos ir al super haciendo bramar el V8 pero con todo en Comfort, o poner en el segundo modo al Audi RS Q8 en versión «erupción volcánica», con todo en su configuración más deportiva, incluso el ESC, que cuenta con un modo Sport. Esto también permite ajustar el sonido del escape, solo en caso de llevar el opcional deportivo. Aún suena a V8, y hay un cambio brusco de sonido cuando las revoluciones pasan cierto rango, pasando de sonar amenazador a aterrador.
Sobre el precio definitivo con todo lo que hemos dicho no tenemos una cifra exacta. Pero teniendo en cuenta que el nuevo Audi RS Q8 2020 cuesta de partida 155.700 euros, que cada uno se haga su presupuesto. Lo que si sabemos con certeza, es que este nuevo super SUV ha llegado con tanta fuerza que pocos podrán aguantarle el pulso.
