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Proyect 356 World Rally Tour: rumbo a la Antártida por una buena causa

Tras un retraso de casi dos años, Renée Brinkerhoff se prepara para la última etapa de su Proyect 356 World Rally Tour con su fiel Porsche 356 A de 1956.

Proyect 356

La piloto de rallies amateur ya ha competido con el deportivo clásico en seis continentes y en todo tipo de terrenos, una tarea extrema para cualquier persona, y más aún si conduce un clásico de 65 años. Ahora quiere comprobar la última masa de tierra poniendo el Porsche a prueba, atravesando 587 kilómetros en la Antártida.

«Aunque estamos muy orgullosos de haber completado todos los rallies de resistencia en los que hemos participado, nuestra verdadera misión ha sido que nuestros esfuerzos en las carreras se conviertan en algo visual en todo el mundo que apoye nuestra búsqueda vocal para acabar con el tráfico de niños», dice Brinkerhoff. «Nuestro objetivo ha sido romper barreras y establecer nuevos récords, y esperamos que nuestra expedición a la Antártida lo consiga».

Proyect 356

El Proyect 356 ya está en tránsito hacia Chile por barco desde su taller en el Reino Unido y, a su llegada, será enviado por aire a las condiciones extremas que esperan en el Glaciar Unión en la Antártida.

Brinkerhoff y el equipo Valkyrie Racing se reunirán en Chile a finales de noviembre y, si el tiempo coopera, el sprint bajo cero comenzará en la Antártida el 5 de diciembre y debería completarse antes de fin de año.

El tan esperado viaje se retrasó desde finales de 2020, y los más de 18 meses de planificación también han permitido que el Proyect 356 de seis cilindros planos de aspiración natural se someta a una reingeniería completa para el traicionero terreno.

Proyect 356: un Porsche muy especial

«El éxito de Renée y de su coche vendrá de la mano de la tecnología adecuada que hemos añadido y de la reducción de masa implementada«, afirma Kieron Bradley, ingeniero jefe de diseño de chasis del proyecto y explorador extremo por derecho propio.

Proyect 356

Bradley sustituyó los neumáticos traseros del vehículo por orugas para la nieve, y en la parte delantera se colocó un par de esquís, junto con un sistema especializado de abrazadera y suspensión. Para la estabilización, el 356 utilizará una suspensión monobrazo con amortiguadores coilover para las dos orugas de la parte trasera.

Aunque la adición de los esquís y las orugas ha aumentado la masa total del Proyect 356 -un problema porque un peso bajo es la clave para conducir sobre el hielo en lugar de hundirse en él-, la masa por pulgada cuadrada, o huella, se ha reducido a menos del cuatro por ciento de la cilindrada estándar.

«El esquí que hemos creado debe realizar entre el 40 y el 50 por ciento del trabajo, compactando y preparando la nieve para que la unidad de oruga la siga, con la hoja inferior guiando la dirección. Esto garantiza que las orugas no se sumerjan bajo la nieve ligera«, explica Bradley.
Orugas de nieve y un par de esquís

Una idea adicional que Bradley tuvo que tener en cuenta fue que los esquís y las orugas debían ser fácilmente desmontables para poder volver a montar los neumáticos de hielo con clavos sin necesidad de cambiar la alineación de las ruedas.

Para realizar el cambio se utilizará un gato neumático inflable. Junto a Brinkerhoff en el 356A para la travesía polar estará el explorador británico Jason de Carteret, que actuará como navegante.

De Carteret ha dirigido más de 50 expediciones, entre ellas al Polo Norte y al Polo Sur, y junto con Bradley ha conseguido dos récords mundiales por el viaje más rápido por tierra al Polo Sur viajando en el Vehículo Polar Thomson Reuters, que ellos mismos diseñaron.

Proyect 356

«Como suele ocurrir cuando me enfrento a un nuevo terreno con mi 356, no he tenido la oportunidad de probar el coche«, dice Brinkerhoff. «La prueba llegará cuando estemos en el Union Glacier y tenemos muchas esperanzas de que el nuevo diseño se demuestre con creces.»

«Como me han dicho Jason y Kieron, no hay ningún terreno en la tierra como la Antártida y, por tanto, ningún lugar donde se pueda hacer una verdadera prueba

Una expedición y un esfuerzo humanitario

El Project 356 World Rally Tour es tanto una expedición como un esfuerzo humanitario, y el desafío de diciembre de 2021 completa el último esfuerzo de una mujer, un coche y una misión global para ayudar a acabar con el tráfico de niños.

A través de Valkyries Gives, la rama filantrópica de su equipo de carreras, Brinkerhoff ha recaudado cerca de medio millón de dólares, con el 100% de los ingresos en beneficio de las víctimas de la trata en todo el mundo.

A su término, Brinkerhoff habrá recorrido cerca de 32.000 kilómetros por los siete continentes, participando en rallies de resistencia como el Peking-to-Paris, el East African Safari Classic Rally y La Carrera Panamericana.

Antes de comenzar su carrera en los rallies en 2013, a la edad de 57 años, la de Colorado asistió a clases en el Porsche Track Experience, donde tuvo al instructor jefe de conducción -y al corredor de resistencia más condecorado de Estados Unidos- Hurley Haywood en el asiento del copiloto.»Me mantuvo ahí fuera y me llevó por la pista, y eso fue una gran inyección de confianza», recuerda Brinkerhoff.

Tuthill Porsche, con sede en el Reino Unido, ha desempeñado un papel de preparación técnica en casi todos los rallies de resistencia de Brinkerhoff, y Valkyrie Racing también ha preparado medidas de sostenibilidad, como los paneles solares en la barra de la grieta, para garantizar que todo el Project 356 World Rally Tour sea positivo en términos de carbono.

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