El Porsche Boxster cumple 25 años, así nació, evolucionó y nos conquistó
El Porsche Boxster cumple 25 años, así nació, evolucionó y nos conquistó
En tiempos de SUV y coches eléctricos es difícil sobrevivir como deportivo, sin embargo ninguna marca como Porsche ha sabido evolucionar sus modelos a la vez que ha integrado otros nuevos. Dentro de su historia el Porsche Boxster supuso una nueva revolución, fue una salvación y ahora está a punto de celebrar un aniversario.
Y es que el año que viene el Boxster cumplirá 25 años, un modelo que nació para ser el nuevo deportivo de acceso de la marca alemana y que triunfó rápidamente luchando contra los prejuicios y la crisis financiera que atravesaba Porsche en aquel 1996, cuando se presentó el modelo de producción en el Salón de Ginebra.
Boxster Concept, rasgos del pasado para el nuevo deportivo
Sin embargo Porsche creó la semilla de su nuevo modelo mucho antes. En el Salón de Detroit se presentó el Porsche Boxster Concept, un prototipo que adelantaba las líneas del deportivo de motor central.
Se eligió ese escenario porque en ese momento Porsche venía un 60% de su producción allí, así que era donde debía dejarse ver por primera vez para ver la reacción del público. El resultado fue tan bueno que en seguida empezaron a echar números para sacar su modelo de producción.
Los rasgos eran un capó largo, buena distancia entre ejes, una cabina justo delante del motor y un escape central indicando que el motor estaba cerca pero más lejos que en un 911. Detalles que se mantuvieron en el modelo definitivo.
El nombre, que rompía con la línea tradicional de series numéricas, tiene un origen más sencillo de lo que parece. Es el fruto de unir los términos Bóxer y Roadster bajo un mismo modelo.
La historia de Porsche está plagada de modelos descapotados o directamente sin techo. El más influyente, al menos en el prototipo del Porsche Boxster, fue el 550 Spyder, el coche de carreras mítico dentro de la marca, ligero y con la potencia suficiente para disfrutar al volante. También hay ADN del 914 o el 718 clásico, todos ellos descapotables enfocados al mejor rendimiento posible aun no teniendo techo.
Un rayo de luz en los 90
La década de los 90 fue difícil para Porsche. Una crisis financiera rondaba por Stuttgart, sin embargo no iban a tirar la toalla, y el Boxster fue una jugada maestra de la compañía para revitalizar sus ventas.
Fue un éxito de ventas y el segundo modelo más vendido junto al 911, lo que les dio una solvencia necesaria para lanzar el que después sería otro modelo clave en su historia, el Cayenne.
Se dice que sin Cayenne hoy no habríamos tenido 911 GT2 RS, GT3 y todas estas versiones para puristas y apasionados del motor, pues sin Boxster no habría habido Cayenne ¿no creen?
Cuatro generaciones de éxito
Lo que empezó con un sencillo motor de 2.5 litros de 6 cilindros bóxer y 204 CV ha ido evolucionando tras cuatro generaciones hasta el espectacular 718 Spyder de la última saga y sus 420 CV de un motor de 4.0 litros atmosférico.
El Boxster 986 recibió una actualización en 2002, pasando a 228 CV y 260 CV en el Boxster S de 2.7 y 3.2 litros respectivamente, culminando con la edición especial Boxster S 550 Spyder, de solo 1953 unidades y con 6 CV más y detalles especiales. Se fabricaron más de 164.000 unidades.
En 2004 evolucionó al Porsche Boxster de código interno 987. Un diseño más fresco pero que mantuvo su silueta recibía un interior totalmente nuevo y motores más potentes, que empezaban en 240 CV y 280 para la variante S. Por primera vez podía equipar la suspensión PASM y los frenos carbocerámicos. El tope de gama fue la serie limitada Boxster Spyder de 320 CV y un techo nuevo. En 2007 introdujo el PDK. Se fabricaron 79.000 unidades. De esta generación nació la versión coupé, el Cayman.
En 2012 le da el relevo un 981 mucho más cambiado. El biplaza alemán renueva por completo el chasis y su diseño, más deportivo y afilado, ampliando su ancho de vías y sus ruedas para mejorar sus atributos como deportivo de motor central y recibiendo dirección electromecánica.
Los nuevos motores eran más eficientes hasta en un 15% mientras mejoraban las prestaciones, con un Boxster de acceso de 265 CV para el motor de 2.7 litros, 315 CV para el Boxster S, y la llegada del GTS en 2014, con 330 CV. Por primera vez se incluyen en el Pack Sport Chrono los soportes dinámicos de la transmisión y el sistema PTV con diferencial mecánico trasero. También hubo versión Spyder, de 320 CV. Se fabricaron 54.000 unidades.
Y volvió el apellido 718. La última generación del Porsche Boxster, 982 de código interno, llegó 20 años después de su debut, en 2016, pasando a llamarse 718 Boxster. La principal novedad fue el uso de motores bóxer turbo de cuatro cilindros, ahora con 300 CV y 350 CV, 366 CV para el GTS. Utilizaba, al igual que el 911 Turbo, un turbo de geometría variable en el 718 Boxster S, siendo Porsche el único fabricante que ofrecía esta tecnología en un coche de producción con motor de gasolina.
En 2019 Porsche recuperó los motores atmosféricos en su 718, lanzando los 718 Cayman GT4 y 718 Spyder, con un 4 litros de 6 cilindros de 420 CV y 420 Nm de par, y un año después llegaban los 718 GTS 4.0, con el mismo bloque pero 400 CV y un chasis menos agresivo. De esta generación a 31 de diciembre de 2019 se han fabricado 45.655 unidades.
A día de hoy el Boxster, y su hermano el Cayman, siguen siendo la referencia en cuanto a deportivos biplazas de tamaño compacto y precio medio-alto, 25 años de evolución constante en busca del placer de conducción y la usabilidad que ofrecen para viajar o cualquier trayecto.
