Porsche 911 GT3 Touring: cuando deportividad y elegancia no están reñidas
Porsche 911 GT3 Touring: cuando deportividad y elegancia no están reñidas
Cualquiera que vea un Porsche 911 GT3 podrá darse cuenta de que se encuentra ante una bestia de circuito, sea o no apasionado de los coches, y es que su enorme alerón, las entradas de aire y los pasos de rueda no dan lugar a dudas. Pero para quien busca la efectividad de un coche así sin llamar la atención, Porsche también tiene respuesta: el Porsche 911 GT3 Touring
Porsche 911 GT3 Touring: lobo con piel de cordero
Si quisieremos resumir la esencia de este nuevo Porsche en pocas palabras, podríamos decir que se trata de un coche de circuitos vestido con un traje más elegante, y es que la principal diferencia de este nuevo Porsche 911 GT3 Touring frente a su hermano GT3 es la pérdida de su alerón fijo, unos detalles en aluminio para algunos acabados, unas colas de escape y faros oscurecidos y un pargolpes del mismo color que la carrocería.
¿Un último detalle? La tapa del motor es de nueva factura, con un nuevo emblema en el que poder leer orgullosos el apellido Touring.
En el interior los cambios siguen manteniendo esta filosofía de refinar el estilo sin perder la deportividad. La alcántara da paso a la piel, que ahora recubre el volante, la consola central y varios paneles de las puertas y el salpicadero. El aluminio también hace acto de presencia con pequeños detalles que no nos cansaremos de mirar.
El cuerpo de un atleta escondido en un esmoquin
Si en el exterior podemos encontrar ciertos cambios estéticos que lo hacen más discreto, debajo de su piel se mantiene casi intacta la increíble mecánica que da vida al GT3 estándar.
Mantiene su increíble motor de 4 litros bóxer con nada menos que 510 CV, capaz de gritar hasta las 9.000 revoluciones antes de pedir que le dejemos estirar aún más las piernas a través de su transmisión, automática de 7 relaciones PDK o manual de 6 velocidades en opción sin coste añadido.
Mantiene también su avanzado esquema de suspensiones y chasis, que a buen seguro nos harán volar por cualquier carretera de montaña, hasta que deseemos frenar estas emociones con su equipo de frenos carbocerámicos.
El precio de este nuevo miembo de la familia GT parte de los 196.081 euros, siendo incluso más caro que un GT3 convencional, aunque para aquel que pueda permitirse uno, la decisión más difícil no será el precio sino de que color vestir a su nuevo deportivo.