Conocemos el nuevo Peugeot 508 2018: la nueva dinastía estilística

Hasta París nos hemos desplazado para conocer a uno de los modelos que más han sorprendido en los últimos meses, el nuevo Peugeot 508 2018. La segunda generación del sedán llega con un lenguaje de diseño cambiado que toma como referencia a los prototipo Instinct y Exalt.

Sin embargo, el 508 no deja de lado su historia, ya que en la parte superior del logo equipa la designación del modelo- en este caso 508-. Esto no es más que un guiño a la historia de la marca francesa, ya que varios modelos de los años 60 solían llevar el número justo en la parte delantera (por ejemplo, el Peugeot 404, el cual tuvimos la oportunidad de probar durante la Peugeot Spirit). De la misma manera el fabricante también hace mención al 504 coupé, al cual rinde un homenaje como un a de las berlinas referencia en su época.

Pero dejemos el pasado atrás y veamos el futuro que se presenta de una forma casi inmejorable. Ya vimos los diseños rompedores de Peugeot en modelo «concept» car como los anteriormente mencionados. Pues bien, la segunda generación del 508 hereda rasgos de ambos modelos; es evidente que el frontal y la firma óptica delantera se asemeja mucho a la vista en el Peugeot Instinct; por otro lado, el interior de la nueva berlina toma como referencia al del Exalt.

El pasado y el futuro colisionan en una berlina entra en el escenario para desbancar a sus rivales -entre ellos, el Opel Insignia, Volkswagen Arteon, Audi A4 o Mercedes Clase C.

Diseño

Evidentemente vemos que no se parece en nada al modelo que sustituye. El frontal es muy deportivo con una personalidad nunca antes vista en la marca. En cuanto a sus dimensiones, se presenta como una berlina más compacta que su predecesor sobre el papel, pero más versátil y aprovechable que este. Su longitud llega hasta los 4,75 metros (8 cm más corto que la primera generación), 1,86 metros de ancho (2 cm más) y 1,40 metros de alto (6 cm más bajo). De la misma manera, gracias a su construcción ligera, logra rebajar su peso total en 70 kg.

Lo que más llama la atención nada más mirar su parte frontal es el juego de luces diurnas LED, las cuales nacen de los faros y mueren en el paragolpes bajo. De la misma forma, la calandra tiene forma en cascada, con un acabado en cromado para mejorar su aspecto general. Los nervios del capó caen hacia el «león» de Peugeot mientras contornean una aerodinámica que le proporciona una gran eficiencia, tanto es así que el 508 2018 arroja un coeficiente aerodinámico de solo 0,26 cx, una de las mejores cifras del segmento.

De lateral impresiona por la caída del techo estilo coupé, así como las nuevas llantas de 19 llantas que puede llegar a calzar (partiendo desde las 16). Su silueta desde esta perspectiva es muy elegante y atrevida, con un pilar C con formas muy fluidas que equipa el anagrama GT (siempre y cuando se equipe este acabado).

Llegamos a la trasera, aquí es donde el 508 adquiere una nueva dimensión, con un nuevo portón y luces trasera LED con efecto 3D; de hecho estas luces son especiales, ya que tienen hasta cuatro niveles de luminosidad – luces de cruce- dependiendo de la intensidad lumínica del día. De la misma forma, vemos que todas las variantes llevan escapes funcionales (no falsos), por tanto es un punto a favor de la marca. El maletero es generoso, arrojando una capacidad de 487 litros. 

Interior

Dentro, una nueva actualización del i-Cockpit se desmarca como uno de los principales protagonistas del modelo. Muchos elementos ya los hemos visto en los modelos como el 3008 o el 5008, pero con una vuelta de tuerca. Por un lado tenemos la misma distribución interior, con un volante compacto y un panel de instrumentos digital. Sin embargo, vemos que en la consola central se haya una nueva pantalla táctil de 10 pulgadas, con una botonería diferente; a su vez, el túnel de la consola es más alto y prominente, donde se aloja la palanca de la transmisión automática EAT8 de ocho relaciones.

También hay nuevos acabados interiores. Para los asientos existe una nueva tapicería en la que se combina el cuero y la alcantara por partes iguales -junto con pespuntes en color-; por otro lado, los elementos del salpicadero adquieren un nuevo acabado «Black Wood«, una madera tratada especialmente para elevar el estándar de calidad interior de Peugeot.

Motorizaciones

En el apartado mecánico, también la segunda generación viene pegando fuerte. En cuanto a las suspensiones, la trasera lleva una configuración multilink  (como ocurre con el DS7 Crossback) -con posibilidad de mejorarla hasta la suspensión neumática, siempre como opción-.

La gama de motorizaciones se compone por cinco integrantes, entre ellos 3 diésel (Blue HDi de 130, 160 y 180 CV) y 2 gasolina (Puretech de 180 o 225 CV -este último solo con el acabado GT-. Todos ellos montarán la transmisión automática EAT8 de ocho relaciones de serie, excepto el 130 diésel que puede equipar caja manual de 6 velocidades.

La marca nos ha adelantado que llegará una motorización híbrida enchufable (PHEV) para enero de 2019, con el motor Puretech de 180 CV unido a otro motor eléctrico -las baterías se alojarán justo debajo de la segunda fila de asientos, aunque mantiene la misma capacidad del maletero-, generando 225 CV de potencia total. Podrá circular en modo 100% eléctrico, al menos durante 50 kilómetros. También nos ha confirmado Peugeot que este motor llegará al 3008, aunque no están totalmente seguros si este aterrizará también en la gama 5008.

A su vez, para 2019 también llegará la variante SW -Station Wagon o carrocería familiar-, con todos los motores disponibles, con la posibilidad de equipar tracción total. Para 2020 se introducirán motores de gasolina más potentes, así como nuevos trenes de potencia híbridos.