Pagani Huayra R. Una obra de arte con 840 CV

Pagani Huayra R

Corazón v12

Diseñado desde cero en colaboración con la empresa HWA, es el V12 más ligero, potente y eficiente jamás creado. Nació del deseo de los clientes de Pagani, que soñaban con un motor V12 de aspiración natural, increíblemente potente (850 CV) y de alto rendimiento.

Aerodinámico

Con un reparto entre ejes de un 46/54%, cada línea y superficie del Huayra R ha sido diseñada para generar la máxima carga aerodinámica, con un objetivo de desarrollo inicial de 1.000 kg de carga a 320 km/h. En este sentido ayuda mucho el gran alerón tasero, más grande incluso que el del Huayra BC.

Solo para circuito

En total solo pesa 1.050 kg, ya que la fibra de carbono y el titanio son materiales casi predominantes en la construcción. Lástima que
no esté homologado para conducir en carretera. Eso sí, su mantenimiento según Pagani es como un coche de calle, revisión cada 10.000 km.

Horacio PAGANI

“Los deportivos como el Ferrari P4 o el Ford GT40, o los coches de Le Mans de los años sesenta y setenta, tenían líneas extremadamente atractivas, y siguen siendo una gran fuente de inspiración en la actualidad. El Porsche 917 es mi favorito, con su forma romántica pero audaz. Es hermoso, elegante y atemporal. De este deseo de libertad, y de la experiencia del Zonda R y los mitos del pasado, surgió la idea del Huayra R, como un soplo de aire fresco”.

¿Por qué admiramos a Horacio Pagani? Porque en los tiempos actuales aún se atreve a crear obras de arte sobre ruedas sin atender a limitaciones o restricciones, como este superdeportivo de 850 CV.

La letra más poderosa ligada a sus modelos vuelve a resurgir y además lo hace como en su origen, con el Zonda R, con un V12 atmosférico capaz de girar hasta las 9.000 rpm, un juguete solo para circuito. Para el V12 atmosférico Pagani se ha asociado con HWA, un equipo que fabrica Fórmula E y los coches del DTM para Mercedes, el nombre completo es Hans Werner Aufrecht. La elección del V12 de aspiración natural en favor del V12 biturbo es cosa de sus clientes, total, no tienes que homologarlo para la calle, pueden elegir lo que sea.

El resultado es una potencia de 850 CV y 750 Nm de par para sus 6.0 litros, que llegan a 8.250 rpm y entre 5.500 y 8.300 rpm, respectivamente. El motor va fijado al monocasco de fibra de carbono directamente y es bastante ligero, solo pesa 198 kg. Aunque esto sea casi un coche de carreras, su mantenimiento según Pagani es como un coche de calle, revisión cada 10.000 km, lo que asegura un uso continuo en varios trackdays seguidos antes de tener que pasar por unas expertas manos que lo pongan al día. Como detalle, ya que algunos circuitos tienen un límite de ruido, puede pedirse unos silenciosos para que no pase de 110 decibelios. El cambio es una caja manual robotizada de 6 velocidades, habitual de la marca. Su particularidad es que forma parte de la estructura del coche, ya que a él van ancladas parte de las suspensiones. Este elemento arroja en la báscula nada más que 80 kg. En total solo pesa 1.050 kg, ya que la fibra de carbono y el titanio son materiales casi predominantes.

Su diseño presenta notables cambios respecto a un Huayra, con un alerón trasero más grande que el de un Huayra BC, un difusor prácticamente como un coche de Le Mans y una aleta dorsal al estilo de los  monoplazas de Fórmula 1.