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Fórmula 1 2020: cerrado por enfermedad

Nunca en la era moderna de la fórmula 1 una pandemia había logrado poner en cuarentena al Campeonato Mundial de Pilotos o Constructores como lo ha hecho el mortal Coronavirus. La temporada de Fórmula 1 2020 y otras fórmulas internacionales también sufren por este virus que ha paralizado sociedades enteras. 

Al gran escritor francés Antoine de Saint-Exupery se le atribuye el axioma de que “lo esencial es invisible a los ojos”. Tuvo y tiene razón, inclusive con algo tan insidioso como el Coronavirus (COVID-19), cuyo diminuto tamaño solo permite observarlo con el más poderoso de los microscopios.

Fórmula 1 2020

Y tan esencial es, o ha sido el Coronavirus, que el 13 de marzo pasado logró lo que una guerra no pudo, detener la celebración de un Grand Prix, la máxima expresión de la contienda automovilística a nivel global, dejando en el congelador, momentáneamente, a todo el campeonato de fórmula 1. Y ocurrió en el paddock del circuito de Albert Park, Australia,  cuando la Federación Internacional del Automóvil (FIA), los detentores de los derechos comerciales de la F1 y los promotores de la carrera decidían suspenderla, por el gran peligro de contagio para los espectadores que este virus mortal representa para cualquier grupo humano.

Tan poderoso es el Coronavirus que la F1 tendrá que reacomodar –si puede– 4 o 5 carreras en su calendario de Fórmula 1 2020 y comenzar el certamen –otra vez, si puede– el 7 de junio en Baku, Azerbaijan. Las carreras de Grand Prix, disputadas desde comienzos del Siglo XX, han sido, son, eventos de la máxima importancia en el mundo del motor, herramienta de propaganda para los gobiernos, grandes empresas y de fama y prestigio para los pilotos. No se cancelan o se suspenden por cualquier motivo banal y esto ocurre así desde inicios de la década de los años 30 y hasta nuestros días.

Viaje en la máquina del tiempo desde la Fórmula 1 2020

Manfred von Brauchitsch tras su victoria en el International Avus de Berlin el 22 de mayo de 1932. A su derecha Alfred Neubauer, jefe de equipo de Mercedes-Benz.

Domingo 3 de septiembre de 1939, Belgrado, Serbia. Tarde húmeda y calurosa en el verano centro europeo. Casi 100.000 espectadores rodean el circuito callejero, trazado en el parque que rodea la fortaleza de Kalemegdan Partk. La competencia no forma parte del campeonato europeo para coches de Grand Prix, que ha acabado el 20 de agosto en Bremgarten, Suiza. Aún así, se apresta a alinear coches de Grand Prix, especialmente a los casi invencibles Mercedes Benz W154 y los Auto Unión Tipo D con motor en popa. No hay equipos italianos porque el dictador italiano, Benito Mussolini, ha impedido a los representantes de Alfa Romeo ausentarse del país. Ambiente pesado, nadie se anima a respirar hondo porque Alemania ha invadido Polonia el 1 de septiembre, hace tan solo dos días.

Y el domingo por la mañana, hasta  allí, donde muchos seguían sordos al retumbar de los cañonazos y bombardeos alemanes, llegan noticias de que Inglaterra y Francia han declarado la guerra al país teutón controlado por los nazis de Adolf Hitler.

Fórmula 1 2020
Manfred von Brauchitsch junto al Mercedes-Benz W 154 3 litros de formula 1 de 1939

La invasión de Polonia ha propiciado que se retiren del evento  los equipos franceses y húngaros, solo cinco coches van a competir por la gloria final… La gloria de ser la última carrera de Grand Prix antes de una matanza de seis años… Con Auto Unión, Tazio Nuvolari será el ganador, última victoria del legendario piloto italiano, comparable al Gilles Villeneuve de 40 años más tarde. Y la carrera se hizo… a pesar de la guerra…

Volvamos a Australia

Viernes 13 de marzo de 2020, circuito de Albert Park, Australia. Hay guerra. No contra un país concreto pero sino  contra ese enemigo invisible, el Covid-19. El mundo está pendiente de la evolución de contagios y muertes por el virus en Europa, especialmente en Italia y España. Australia parece estar en otro planeta… aunque tiene unos pocos contagiados.

Los equipos han discutido el jueves si correr o no. Ferrari, Alfa Romeo, Renault y McLaren –que ya se había retirado al dar uno de sus mecánicos positivos al test–, son cuatro votos en contra, Red Bull, Alpha Tauri (ex Toro Rosso), Racing Point y Mercedes, quieren seguir adelante.

En 1939, Alfred Neubauer, el jefe del equipo Mercedes en esa época, obviamente había querido correr en Belgrado aunque solo hubiese cinco coches… Habían llegado para representar a la marca, si, pero también –aunque estuviese de acuerdo o no– al “Reich”. Esa mañana de septiembre, su piloto Manfred von Brauchitch ya estaba sentado en un avión de Lufthansa rumbo a suiza, huyendo, cuando Neubauer, desesperado, le hizo regresar al circuito para correr. Su ansiedad podía esperar.

Y el 12 de marzo del presente año, el austríaco Toto Wolf veía la oportunidad de ganar preciosas ventajas en el certamen ante un equipo Ferrari muy debilitado. Tras los tests invernales de Barcelona los italianos estaban a mas de 1,5 segundos de las Flechas de Plata. Y Wolf, 81 años después, hacia las veces de su antecesor Neubauer: Mercedes corre, sí o sí… Aunque su piloto estrella, el inglés Lewis Hamilton no estuviese muy de acuerdo con la realización de la carrera. Lewis había dicho: “El dinero es el rey”… y se había preguntado que hacía la F1 allí… Pero en este caso, Lewis no iba a hacer lo que Brauchitch, irse…

En 1939, el director general de Mercedes no podía, sin atenerse a consecuencias, suspender la participación de su equipo en un Grand Prix. En todo caso tendría que dar demasiadas explicaciones a los ministros del Führer. Pero en 2020, por suerte, Toto Wolf tiene una posición más desahogada.

El jueves 12 de marzo a la noche, vibró su móvil con una llamada del gran patrón de Mercedes AMG, el sueco Ola Kalenius. Hablaron algunos minutos… el rostro de Wolf se llenó primero de preocupación, después se distendió mientras asentía repetidamente con un movimiento de cabeza a lo que la voz del otro extremo le explicaba. En Europa la situación había dado un giro radical. Ya no era cuestión de correr midiendo localmente si podía, o no, haber consecuencias. Se trataba de una toma de posición y responsabilidad global de la marca ante la situación.

Después de esa llamada, Toto habló  con responsables de la FIA y estos recibieron un corto mensaje. Mercedes cambiaba el sentido de su voto. No correr. Quedaba así sellado el destino del Gran Premio de Australia 2020.

Se suspende la función de la Fórmula 1 2020

La fórmula 1 2020 quedaba cerrada por enfermedad. El mundo está convaleciente. Probablemente se requiera esperar hasta mediados-finales de junio para que toda actividad económica o deportiva vuelta a la normalidad.

fórmula 1 2020

Tras el Gran Premio de Belgrado de 1939, comenzando la Segunda Guerra Mundial, el antecesor de Toto Wolf, Alfred Neubauer regresaba a Alemania lamentándose que muchos amigos iban a convertirse en enemigos y que la sangre iba a correr por doquier. Toto, sus colegas, jefes de equipo y todos los relacionados con la F1 regresaron a Europa con un panorama incierto, es verdad, pero pensando en recuperar aquellas emociones de las carreras que por un tiempo quedarán en suspenso. Aunque las añoremos, valdrá la pena esperar.

Texto por: Orlando Ríos

¿Cómo están el resto de campeonatos de motor?

Pues en la misma situación que la Fórmula 1 2020 o pero incluso. El WRC solo pudo llegar hasta la prueba de México, teniendo que posponer Argentina. En el WEC, aunque Le Mans no se celebraba hasta Junio, se movió a Septiembre. Las motos paradas y así cada prueba a lo largo y ancho del planeta. Si quieres saber cual es la situación actual, aquí te dejamos el calendario de pruebas de competición debido a esta crisis sanitaria.

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