Guía para el nuevo etiquetado de combustible de vehículos

El 12 de octubre entró en vigor el nuevo etiquetado de combustible para vehículos de carretera. El objetivo es que todos los vehículos y todas las estaciones de servicio tengan la misma identificación para los carburantes, se pretende que todos los conductores que visiten países ajenos al suyo puedan identificar el combustible adecuado. Esto se ha aplicado en los 28 Estados miembros de la Unión Europea, los países de EEE (Islandia, Liechtenstein y Noruega) y también Macedonia, Serbia, Suiza y Turquía.

La nomenclatura es diferente para cada tipo de combustible, los diferentes tipos de gasolina vienen rodeados por un círculo, en el interior del circulo encontramos la letra «E» y unos números que designan los bio componentes específicos presentes en la gasolina (E5, E10 y E85).

El etiquetado de combustible utilizado para el gasóleo viene en forma cuadrada, en el interior encontramos unos números que hacen alusión a los componentes de este tipo de combustible. Serán B7 y B10. También encontramos otro etiquetado con las letras «XTL», la cual se utiliza para identificar el diésel sintético, es decir, el que no deriva del crudo de petróleo.

Por último tenemos los vehículos gaseosos, la etiqueta esta representada por un rombo. En su interior, como en los casos anteriores, hallamos los siguientes caracteres: H2 (Hidrógeno), CNG (Gas Natural Comprimido), LPG (Gas Licuado del Petróleo) y por último LNG (Gas Natural Licuado).

¿Dónde veremos estas etiquetas?

Además de estar visible en los surtidores de repostaje de las estaciones de servicio de todos los países de la Unión Europea, también lo están en aquellos vehículos nuevos que se hayan matriculado a partir del 12 de octubre del 2018. La norma establece que esta nomenclatura se tendrá que lucir en forma de pegatina en la tapa del depósito del vehículo, y también debe aparecer en el manual de usuario.

Es importante resaltar que estas nuevas etiquetas informativas no sustituyen ni modifican las presentes denominaciones comerciales. Su propósito es aportar más información al conductor, complementando así el etiquetado ya existente.