Citroën C3, una nueva revolución francesa

El utilitario galo llega para conquistar al público por precio y confort, pero sin descuidar dos aspectos fundamentales como el diseño y la tecnología.

Tuvimos la suerte de conocer al nuevo C3 en noviembre y ahora por fin hemos podido probar la cuarta generación del coche más popular de Citroën, que ha vendido más de 5,6 millones de unidades desde su lanzamiento, en 2002. En el artículo anterior ya os lo presentamos (puedes verlo aquí), así que ahora nos centraremos en la gama, los futuros modelos que están por venir y, sobre todo, en la prueba dinámica.

Desde su lanzamiento se presenta con dos opciones, un gasolina tricilíndrico de 100 CV y un eléctrico puro de 113 CV. Ambos están a la venta en dos únicos acabados, You y Max. Desde la marca aseguran que en la página web su configuración no puede ser más sencilla, escoges uno de los dos acabados, el color y listo. Por otra parte, los precios no pueden ser más competitivos, desde 14.990 euros para el de combustión y 23.800 euros (sin ayudas) para el cero emisiones. A finales de año la gama aumentará con la incorporación de una versión microhíbrida de 48 voltios (etiqueta Eco) que rondará los 20.000 euros. Y, en 2025, veremos otro eléctrico puro con una batería más pequeña y una autonomía de unos 200 km.

Empezemos por el gasolina

Es una mecánica de sobra contrastada en el Grupo Stellantis y, asociada a un cambio manual de 6 relaciones, este tricilíndrico de 1.2 litros ofrece unos consumos de lo más ajustados, que en ningún caso superarán los 6 litros a los 100 km. Su dirección es precisa y la suspensión absorbe bastante bien las irregularidades del terreno. Aquí merece la pena destacar el buen hacer de la reconocida suspensión Citroën Advanced Comfort. Y si añadimos los asientos Advanced Comfort cualquier viaje se hará placenteramente. No esperes grandes prestaciones, pero el habitáculo es bastante amplio (mucho más que en la generación anterior) y puede albergar a cuatro adultos sin problemas. La capacidad del maletero es de 310 litros. La misma en ambos casos.

 

El cuadro de instrumentos es básico y proyecta la información suficiente justo delante de la vista del conductor, que no tiene que apartar la vista de la carretera en ningún momento. Es una especie de Head-Up Display que refleja la información del vehículo en una sección negra brillante situada entre la parte superior del salpicadero y la parte inferior del parabrisas. Si optamos por la versión básica, el acabado You, en lugar de contar con una pantalla multimedia táctil de 10,25”, donde manejar todo el infotainment, tendremos un soporte para colocar nuestro Smartphone. En cualquier caso cuenta con varias tomas de carga USB tipo A.

Turno del eléctrico

Para diferenciarlos a simple vista te tendrás que esforzar un poco. Solo el anagrama “ë” en azul, en los laterales y en la trasera, delatan su condición. El motor eléctrico de 83 kW/113 CV proporciona potencia y par más que suficientes. Los viajes tampoco serán un problema gracias a la capacidad de carga rápida de 100 kW (CC), que permite pasar del 20 al 80% de la capacidad de la batería en 26 minutos. La autonomía homologada en ciclo WLTP es de 326 km en ciclo combinado. La recarga estándar de CA tarda unas 4,10 horas utilizando una potencia de 7 kW, o 2,50 horas si se dispone de 11 kW. Cronómetro en mano, pasa de 0 a 100 km/h en unos 10,4 segundos, y la velocidad máxima es de 135 km/h, frente a los 160 km/h del gasolina.

No cuenta con levas para regular la intensidad de la frenada regenerativa. En su lugar, tenemos un modo “C” en la palanca de cambios, donde dejamos un poco más “suelto” el coche. La competencia suele apostar por lo contrario con el modo “B”, pero en Citroën siempre han hecho gala de una gran originalidad. En cualquier caso, y en cualquier modo, la frenada no es intrusiva y cuando levantamos el pie del acelerador no sentimos el “mordisco” de otros coches.

 

A los mandos te lo pone todo bastante fácil y su conducción elevada permite una gran visibilidad. Sus contenidas dimensiones también ayudan a la hora de aparcar en espacios reducidos. Nosotros, durante nuestra toma de contacto en las cercanías de Viena hicimos un consumo inferior a los 12 kWh/100 km, cierto es que no fuimos por autopista y no superamos los 100 km/h, pero quedamos gratamente sorprendidos por la eficiencia del nuevo ë-C3. No obstante, en ciclo urbano la marca homologa 459 km de autonomía (WLTP).

El bestseller de Citroën

Argumentos más que de sobra para pensar que, si de la anterior generación, a la venta desde 2016, se vendieron 1,6 millones, este modelo seguirá siendo el bestseller de Citroën. En cuanto al mix de ventas gasolina/eléctrico, desde Citroën España nos aseguran que todo lo que sea superar el 10% de las ventas–como la media del mercado nacional– será un éxito para el eléctrico puro.

 

En cualquier caso, nos parece un acierto de coche: sencillo, funcional, atractivo y económico. El mejor modelo para estrenar el nuevo logotipo de la marca francesa, que pronto llegarán al resto de modelos de la gama. Una nueva revolución francesa está en camino.