Alejandro Mesonero-Romanos y su misión en Alfa Romeo, The Italian Job

Alejandro Mesonero-Romanos fue durante nueve años años jefe de diseño de Seat, y máximo responsable del estilo de los Cupra. En julio de 2020 decidió pasar al Grupo Renault, y solo 11 meses después Alfa Romeo anunció su fichaje.

El diseñador madrileño siempre ha sido muy amable con CAR, y en los salones internacionales nunca hemos desaprovechado la ocasión de charlar con él.

Una vez le preguntamos sobre qué pasaba por su cabeza cuando le tocaba rediseñar un coche que no había hecho él, y nos dijo: “Bueno, yo me lo tomo desde un punto de vista no egocéntrico. Es decir, vienes a una marca a trabajar y lo que tienes que hacer es como una carrera de relevos. Te pasan el relevo y sigues corriendo”.

Es esta visión positiva y su talento para diseñar y dirigir equipos lo que le ha llevado hasta la cúpula de Alfa Romeo. Ahora tiene en sus manos un relevo que antes pasó por muchos maestros del diseño.

Nos reunimos con Alejandro Mesonero-Romanos en el Museo Storico de Alfa en Arese (una visita imprescindible para cualquier aficionado, cerca del aeropuerto de Milán) para hablar de su nueva responsabilidad y del futuro de la marca italiana. 

“El pasado mes de junio me llamaron para venir a Alfa Romeo. Hacía poco que había aceptado la propuesta de Luca de Meo (director general del Grupo Renault) de irme con él para un proyecto muy bonito, pero a Alfa Romeo no se le dice que no.»

«Soy un gran apasionado de los coches italianos, así que justo cuando me acababa de instalar en París, decidí venirme a Italia. Siempre me ha gustado este país. Cuando estaba estudiando en Londres en 1994, vine aquí con cuatro amigos de la escuela y visitamos todo: Pininfarina, Zagato, Touring, Bertone, etcétera. Fue en ese momento cuando me dije: ‘Si un día tengo una buena oportunidad, me vendré a trabajar a Italia’. Antes hubo algunas ocasiones pero no era buen momento. Ahora con la creación de Stellantis, es el momento ideal”. 

Desde la llegada de Alejandro Mesonero-Romanos todo ha sido muy intenso. “Llegué aquí el 1 de julio y hemos trabajado día y noche para hacer varias cosas al mismo tiempo. Lo primero que me pidió Jean-Phillippe Imparato (consejero delegado de Alfa) fue una presentación de la estrategia de diseño.»

«Trabajamos duro julio y agosto y se la presenté a Carlos Tavares (CEO de Stellantis) el 9 de septiembre. Es una estrategia con visión a largo plazo, con algunos modelos virtuales, y ha gustado muchísimo. Además me he encontrado encima de la mesa tres proyectos, más otros tres que llegarán más tarde. Vamos a lanzar un coche cada año hasta 2026. Hay que fijar por tanto la estrategia de diseño de la marca, el ADN, y también reforzar el equipo de diseño, aplicando la experiencia que tengo en el Grupo Volkswagen y en Renault. Estoy muy feliz porque hay mucho por hacer y es muy bonito, es una marca increíble.»

¿En qué va a cambiar Alfa con su llegada?

El cambio no soy yo, el cambio es el Grupo Stellantis. Han cogido las marcas italianas con mucha fuerza, se va a invertir mucho dinero en proyectos, con una estrategia a diez años vista que incluye todo el proceso de electrificación.

En 2024 lanzaremos nuestro primer eléctrico 100%, y partir de 2027 la marca será totalmente eléctrica. Esto es lo más importante. En cuanto a productos estamos planificando todos los coches que vamos a hacer de aquí a 2030, ahora mismo los de 2024/2025/2026.

Respecto al diseño, lógicamente queremos mejorar el atractivo. Actualmente el Giulia y el Stelvio son estupendos, muy elegantes, y en cuanto a ingeniería me han sorprendido agradablemente, con un chasis brutal. Son muy buenos, lo que voy a intentar aportar es una estrategia a largo plazo, una continuidad, más carácter quizá.

Darle una vuelta a eso que llamamos la “fuerza interna”, el espíritu, la mirada, las proporciones, el interior, en fin, todo. Darle una fuerza visual aún más potente que la que tiene hoy en día. Aquí en el museo habéis visto lo que ha sido la marca en el pasado.

Aquí podemos también ir en busca de elementos que son interesantes para utilizar en los nuevos modelos, proyectándolos de una manera progresiva. Esto por supuesto no quiere decir que vayamos a hacer coches retro, miramos al futuro, pero sí podemos aprovechar este legado glorioso. 

¿Cómo se relacionan los diferentes departamentos de diseño de Stellantis?

Tenemos contacto y al mismo tiempo somos independientes. Como ejemplo, hace poco vinieron cuatro diseñadores de otras marcas del grupo a trabajar dos semanas con nosotros, y mandé otros cuatro a la marca de donde venían. Eso se suele hacer y es muy refrescante en cuanto a ideas.

Quiero decir que no trabajamos en cajas cerradas, hay intercambio, y a la vez mantenemos la independencia de cada marca a nivel de estilo. En Stellantis ponen mucho énfasis en las diferencias que percibe el cliente, más quizá que en otros grupos.

Además, tengo mucha libertad creativa, llevo ya 26 años haciendo esto y es el momento en el que más libertad he tenido. Los diseñadores tenemos que trabajar con sinergias porque compartimos plataformas, con lo cual debemos mantener contacto.

Desde que he llegado he contratado a 12 personas, y el equipo que tenemos es muy fuerte. Si necesitamos diversidad u otros puntos de vista, podemos llamar a otros diseñadores, es la práctica habitual, en Volkswagen también lo hacíamos”.

Dice que ha contratado a más de 10 nuevos miembros del equipo, ¿cómo se organizan dentro del departamento?

«Somos más de 50 personas, tenemos por ejemplo a 10 profesionales en exteriores y todos trabajan en, como mínimo, dos proyectos a la vez. Tener varios diseñadores te da más riqueza creativa, y de esto se trata, de tener 10 respuestas a la misma pregunta.

Hacemos competiciones, concursos, y se van eliminando diseños hasta que elegimos un ganador. Mi trabajo es inspirarles y guiarles, como si fuera un director de orquesta.»

La próxima novedad de Alfa será el Tonale, un SUV compacto cuya línea exterior ya está definida y que se lanzará en junio, un proyecto en el que, lógicamente, Mesonero no ha participado. Este se desarrolló bajo la supervisión del antecesor del español, el estadounidense Scott Krugger. Según Mesonero, la preocupación por la calidad ha sido primordial en el nuevo Tonale. No obstante, el primer coche en el que veremos el fruto del trabajo de Alejandro Mesonero-Romanos y su equipo llegará en 2024. 

¿Cómo influye en el diseño la actual tendencia de la propulsión eléctrica?

Cambia la arquitectura porque no hay mucho sitio donde poner las baterías, todos los fabricantes hacemos lo mismo: colocarlas lo más bajo posible, debajo del piso y entre los ejes, no hay otra opción. Por eso los coches se hacen más altos, con más distancia entre ejes, pero con voladizos cortos para que el coche no sea demasiado largo.

También ruedas más grandes, para compensar en la vista lateral el incremento de la altura. Toda la dificultad está en encontrar el compromiso óptimo entre la altura de las baterías, la habitabilidad interna, la aerodinámica, que juega un papel importantísimo.

No solo por el consumo, sino sobre todo por el reto que supone la autonomía. Es quizá lo primero que miran los compradores de un automóvil eléctrico. Bueno, lo primero será el diseño [risas]. Sea eléctrico, gasolina o a vapor, el coche seguirá siendo un objeto pasional.

El hecho de transportarte en tu propio vehículo seguirá siendo una continuación de tu hábitat, de tus gustos… Y, además, un automóvil es una escultura, un objeto artístico. El diseño siempre tendrá esta capacidad de emocionarnos.

Cuando pensamos en Alfa pensamos en diseño pero también en motores potentes, en un sonido bonito, prestaciones…, ¿en que va a quedar todo esto con la electrificación?

El reto principal creo que es la ligereza, esta antigua batalla. Estamos desarrollando un concepto al que llamamos elettrico leggero. Es un concepto técnico, de ingeniería, pero que también aplicamos al diseño. Han cambiado las tornas y los referentes.

En los eléctricos sí tenemos la aceleración y también el manejo, que puede ser tan bueno como el de cualquier coche de combustión. El sonido es algo en lo que estamos trabajando, pero que no imite al coche térmico. El Alfa seguirá un siendo coche muy divertido de conducir, y su aspecto también debe ser ligero, es algo en lo que estoy insistiendo mucho a los diseñadores. 

Y vuelvo a la importancia de la historia aerodinámica donde tenemos una historia maravillosa, con los BAT de Scaglione, o los Giulia TZ con la coda tronca (trasera cortada) de Zagato.

Ahí ya os doy una pista de un tema que sin duda vamos a explotar a tope, porque además funciona muy bien aerodinámicamente. También tenemos los techos double bubble (doble burbuja) de los Zagato que se empleaban en los Alfa Romeo. 

Algunos creemos que con tanta pantalla los interiores están perdiendo personalidad, ¿qué van a hacer con los habitáculos de Alfa?

No queremos iPads con ruedas, queremos coches muy orientados al conductor. En los últimos años la tecnología ha ido tan rápido que casi nos han dejado sin tiempo para pensar.

Por eso estamos dando un pequeño paso atrás para pensar en cómo organizarlo. Estamos haciendo unos interiores rompedores y poniendo mucha atención en la instrumentación, con dobles relojes, y también en el volante. Además, vamos a ser especialmente buenos en iluminación, estamos haciendo cosas muy bonitas con los faros, y también respecto a las llantas. 

Desde los años cincuenta Alfa ha destacado por las berlinas deportivas, como el actual Giulia. Ahora que todo el mundo quiere SUV, ¿cómo ve el futuro de estos coches? ¿Y los spiders tan típicos de Alfa?

Te daré una respuesta de gallego: Alfa no va a hacer solamente SUV, ahí lo dejo. Aerodinámica, coche bajo, coda tronca… Respecto a los spider, nos encantaría. Primero tenemos que hacer los deberes, pero claro que es un tema que me gusta. 

¿Cómo se siente tras el éxito logrado por los Seat más recientes y especialmente por el Cupra Formentor?

Formentor y todos los Cupra, porque ha sido una historia muy bonita. Estoy contentísimo de que los coches estén funcionando, para eso trabajamos, para conseguir darle una vuelta a Seat y crear Cupra.

Crear una marca de cero exige cargar un poco las tintas, tienes que hacerte notar en la calle. Sigo en contacto con mis antiguos compañeros y con Jorge (Jorge Díez, su sustituto), y espero que dentro de 10 años mire atrás y pueda estar todavía más contento de lo que hayamos hecho en Alfa. 

¿Cuánto tardan desde que empiezan con un diseño hasta tenerlo terminado?

Cada vez se tarda menos en todo el proceso, y actualmente, desde que comenzamos con los primeros bocetos hasta que “se congela” el diseño definitivo, puede pasar menos de un año. Estamos muy cerca de Imparato (CEO), tenemos las oficinas separadas por una puerta, la comunicación es directa e inmediata y hacemos revisiones de proyectos con frecuencia. 

También con los responsables de producto, de ingeniería, de marketing… Somos un grupo pequeño para tomar decisiones con rapidez. Haremos coches viscerales, que los veas por primera vez y te enamores. También es importante darles la noción de modernidad, los Alfa siempre han sido avanzados.

Nos centraremos en los coches deportivos de prestigio, puedes llamarlo premium. Queremos que tengan un aspecto llamativo y osado, que veas un Alfa Romeo en la calle y digas ¡uuwwaau! Eso es lo que quiero que los clientes digan cuando vean un Alfa Romeo.